"Bichos" (Henrique Amoedo).

En «Bichos» hay humanos que se comportan como animales y animales que lo hacen como humanos. Igual que en la vida misma. «Bichos» es un montaje dirigido por Henrique Amoedo (se puede ver este próximo domingo, 5 de junio, a las 19:00h, en el Palau de les Arts, dentro de la programación del Festival 10 Sentidos) para el grupo Dançando com a Diferença, integrado por personas con y sin discapacidad. La danza como herramienta integradora. El escenario rompiendo cualquier barrera diferenciadora. Desgraciadamente, no como en la vida misma. De ello, de la obra y del poder del baile para transformar las cosas, hablamos con el propio Amoedo.

¿Qué fue lo que te interesó del texto original de Miguel Torga para querer adaptarlo?

En realidad a quien interesó el texto de Miguel Torga no fue a mí, pero sí a Rui Lopes Graça, coreógrafo a quien el grupo Dançando com a Diferença invitó para hacer está creacion. Segun el propio Rui Lopes Graça ha afirmado en diferentes ocasiones, lo que más le impactó en la história fue la fuerza de los sentimentos que estaba presente en cada uno de animales de la obra de Torga.

 ¿Cuál crees que es el mensaje que transmite la obra?

Colocar la duda sobre la sociedad y la propia existencia humana. Parece algo vago, lo sé, pero cuando animales humanizados o humanos casi animalizados, aparecen aquí luchando consigo mismo, con el entorno en el que viven y con lo Divino, es fácil entender el mensaje y la profundidad del mismo.

¿Existen relamente tantas diferencias entre determinados comportamientos de los humanos y los animales? ¿Se puede llegar a dudar en algún momento quienes son los animales y quienes no?

Creo que si nos centramos en los sentimentos, de la manera como son presentados por Miguel Torga y de la forma como son representados en la obra de Rui Lopes Graça, no conseguimos distinguir entre quienes son los humanos y quienes son los animales. Escénicamente es muy clara, ya que cada animal, y tambien los hombres, tienen máscaras que los identifican claramente.

Las coreografías las firma, como has apuntado, Rui Lopes Graça. ¿Le diste mucha libertad creativa o le dabas indicaciones? ¿Qué querías que transmitieran las mismas?

Sobre mi dirección, en el grupo Dançando com a Diferença cuando invitamos a un coreógrafo, él tiene total libertad creativa. La invitacion surge porque lo conocemos, creemos en su trabajo y admiramos su trayectoria y por ello no podemos limitar su creatividad. Las únicas indicaciones van en el sentido de proporcionarle la mayor información posible sobre el reparto y en acompañarle en todo el proceso creativo, para que sus intenciones se mantengan durante el tiempo que está en cartel, trabajando con nuestro elenco.

¿Cómo fue el trabajo con las máscaras? ¿Tomaste alguna precaución para que no se transmitieran sensaciones contrarias a las que buscabas?

Sí, totalmente. Cada una de las máscaras, en su proceso de construccion, tenía en cuenta, las características tanto físicas como psíquicas de cada personaje. Queríamos un toro dócil y que no diera miedo, por ejemplo. Y eso sucedía con todos los personaje  que estaban en escena. Fue un trabajo muy minucioso que nos dejó a todos muy felices.

¿Cómo surge la idea de crear el grupo Dançando com a Diferença?

En Brasil ya creé, en la ciudad de Natal, Rio Grande del Norte, con el profesor Edson Claro, una compañía de danza llamada Roda Viva. Creé y dirigí est compañía, que fue un hito importante en la danza en aquel tiempo, entre 1994 y 1999. Construímos su repertorio con creaciones de los coreógrafos brasileños más importantes de aquelllos años. Viajamos mucho dentro de Brasil y representamos a nuestro país en el I Festival Internacional de Dança en Silla de Ruedas, en Boston (Estados Unidos). Dimos los primeros pasos en Brasil de este tipo de trabajos. Despues colaboré, a través de una acesoría artística, con Ivone Satie y con Luís Ferron,  y creamos, en Diadema, la Compañía Experimental-Grupo Mão na Roda.

Dançando com a Diferença surge, en Madeira, como consecuencia de estas dos experiencias sucedidas en Brazil. Fui a Portugal a estudiar e hice el postgraduado en Performance Artística y Danza en la Facultad de Motricidad Humana en Lisboa, bajo la dirección de la profesora (y tambien coreógrafa) Elisabete Monteiro. En este postgrado creamos el concepto de «Danza Inclusiva», que actualmente es utilizado, muchas veces, de forma descuidada y un poco indiscriminada por todo el mundo. Muchos que lo usan nunca fueron a la fuente para qué es lo que está por detrás de este concepto, porqué fue creado y cómo debe ser aplicado. Pero esta discusión la dejaremos para otra ocasión. En este proceso que contaba, terminé siendo invitado para trabajar en la Isla de Madeira para implementar un trabajo usando como base el concepto de la Dança Inclusiva. Lo que inicialmente era un trabajo de un año, acabó durando, hasta ahora, 15 años. Que vengan 15 años más de muchos exitos y de expancion y creacion de grupos de Dançando com a Diferença por todo el mundo.

¿En qué crees que les beneficia (encima y ya fuera del escenario, en su vida diaria) participar en un montaje escénico a los miembros de GDD con discapacidad?

Entre todos los grupos que conforman nuestro proyecto, Dançando com a Diferença es el que tiene mayor visibilidad pública. Colaboramos con escuelas especializadas en la educacion artistica, dentro del ámbito de la danza; tenemos un grupo en una escuela de referencia para alumnos que son sordos; tenemos Dançando com a Diferença Junior y Senior, ademas de un trabajo desarrollado con los padres de los niños con discapacidad. Todo este trabajo de iniciacion tambien nos ayuda a promover la inclusion a través de la danza, porque es un trabajo de preparación artistica (y tambien para un futuro de vida independiente). La danza es un recurso primordial para que se sientan motivados y puedan aprender, desde las cosas mas simples como la higiene personal, hasta coreografías, pasando por enseñarles a ser responsables de sus actos. Es una larga discusión, pero la danza puede, y debe, estar presente en los diferentes niveles de desarrollo de todas las personas com discapacidad que están en nuestro equipo.

Pero no podemos verlo todo desde el lado de los intérpretes. No nos podemos olvidar que la creación de un repertorio y nuestra presencia en la programación regular de diferentes teatros, en distontos lugares, tambien nos ayudan en este proceso de inclusión a través de la danza. Se crean nuevos espacios, nuevos mercados y con ello se pretende crear más trabajo que lleve a la profesionalizacion de todos. Es un proceso largo, largo, lleno de avances y retrocesos, pero es un viaje muy hermoso para llegar al objetivo deseado.

Y a las artes escénicas, ¿en qué les beneficia contar con intérpretes con alguna discapacidad? ¿Qué le aportan?

Las artes escénicas se benefician con una nueva mirada, con la transformacion de unos patrones estéticos establecidos hace mucho tiempo, con la aproximación a una realidad más cercana. La diferencia, la creatividad y las nuevas posibilidades creadas por estos cuerpos etiquetados como discapacitados, son vistos como nuevas capacidades que pueden traer un universo infinitamente rico. Basta tener la capacidad de mirar desde otra perspectiva.