"Next man", de Arjan Brentjer.

«Next man», de Arjan Brentjer.

Fiel a su cita anual, vuelve el Festival de Cortometrajes de Radio City. Ya son dieciseis ediciones mostrando algunas de las obras más interesantes del panorama nacional e internacional. En esta ocasión serán 70 las películas que conformarán la Sección Oficial, con mayoría de nacionalidad española, pero también con producciones de otros países como Estados Unidos, Francia, Canadá, Eslovaquia o Irán. Todas ellas optarán al Primer Premio, dotado de 1.000 €, que en 2015 ganó «Bikini», del valenciano Óscar Bernàcer.

Del 22 de abril al 26 de mayo se proyectarán los cortometrajes seleccionados, entre los que destaca «El corredor», de José Luis Montesinos, ganador del Goya de este año. No es la única cinta que llega con el aval de un premio. «Discipline«, del suizo Christophe M. Saber, que narra el conflicto que se desata en una tienda de alimentación, regentada por inmigrantes, después de que un padre abofetee a su hija, se hizo con el máximo galardón en la última edición de Cinema Jove. En ese mismo certamen, «The Chicken», de Una Gunjak, consiguió dos menciones especiales que sumar a su larga lista de condecoraciones. Una preciosa historia (que guarda ciertas similitudes con la recién estrenada «Efraín») entre una niña y una gallina en plena guerra de Bosnia. Esteban Crespo, que acarició en 2014 el Oscar gracias a su nominación por «Aquel no era yo», concursa con «La propina».

"El corredor", de José Luis Montesinos.

«El corredor», de José Luis Montesinos.

Otros nombres propios del Festival son el cineasta («Dispongo de barcos», «Gente en sitios») y dramaturgo («Urtain») Juan Cavestany y la actriz («Las 13 rosas», «Los abrazos rotos» «Vis a vis») Marta Aledo. El primero participa con la comedia «Microondas«, mientras que ella lo hace con «Jingle» (Premio Proyecto Corto Cinema Jove 2014) donde se pone en la piel de dos corresponsales de guerra secuestrados. Sobre Ramón Barea recae todo el peso interpretativo de «Aún no estoy muerto», de Alain Lefebvre. Mientras que en el recomendabilísimo «Los cárpatos» se reparte entre dos actrices muy inspiradas como Sonia Almarcha y Cecilia Freire. Detrás de la cámara, el guionista («Casual day», «Cinco metros cuadrados») Daniel Remón. Un recorrido, de la escritura a la dirección, que también ha hecho (eso sí por primera vez) Clara Roquet («10.000 km») con «El adiós».

Es habitual que actores con cierto nombre o popularidad participen en cortos. También ocurre en algunos de los finalistas del Festival de Radio City. Belen Rueda o la nunca demasiado reivindicada María Vázquez, forman parte del reparto de «Una vez», firmado a medias por Sonia Madrid y María Guerra, con música de Las Migas y el fantasma de la violencia machista sobrevolando el argumento. Juanjo Artero, Marta Belenguer y Manolo Solo protagonizan «Un millón», de Alex Rodrigo (que ya sorprendió, muy gratamente, hace unos años, con la web serie «Libres»), una dura reflexión en torno a la televisión basura. Y Macarena Gómez y el chanante Ernesto Sevilla ponen rostro a «Vostok», de Miquel Casals, sobre el primer programa espacial soviético, en los años sesenta, que puso a un cosmonauta en la orbita de la Tierra.

"Portrait of a wind-up maker", de Darío Pérez.

«Portrait of a wind-up maker», de Darío Pérez.

Otras películas recomendables, por unos u otros motivos, son «Todo lo demás», del argentino Federico Untermann, con Noelia Castaño; «Iron mountain», una mini-superproducción, con unos deslumbrantes efectos especiales y cinco directores encargados del proyecto; «Zéro M2», de Matthieu Landour, o las peripecias que vive un joven que acaba de alquilar un piso en París que se va encogiendo; «El abrazo», del valenciano Iñaki Sánchez Arrieta; «Next man», de Arjan Brentjer, una especie de homenaje a la ciencia ficción de los años setenta; «En la azotea», de Damià Serra, que cuenta con la garantía que siempre acompaña a la ESCAC; «Any day now», de Albert Uría, tan inquietante como adictiva y con una galería de personajes imposibles; «Burned», de Jaime Valdueza, de impecable factura y ritmo narrativo; «14 anys i un día», de Lucía Alemany, que trata con frescura un tema tan espinoso como los conflictos generacionales, en este caso entre una madre y una hija; o «Alta costura», de Miguel León Marcos, en el que suena «Gran» de Senior i el Cor Brutal y cuenta con música de Xema Fuertes.

La animación también tiene su hueco en el certamen. Desde la impresicindible, y algo futurista, «Portrait of a wind-up maker», de Darío Pérez; hasta «Garbanzos con azúcar», de Antonio Aguilar, que mezcla imagen real con dibujos (obra estos últimos de Francis Porcel), para relatar un angustioso episodio de la Guerra Civil española; pasando por «White», de Élodie Ponçon, «Dáwit«, de David Jansen o el luminoso «About a mother», de la rusa Dina Velikovskaya, en los que el blanco y negro acaba hipnotizando al espectador.

Las proyecciones serán siempre en domingo y lunes, mientras que los sábados se programarán unos especiales de cortos valencianos, con algunos de los seleccionados en el Festival y otros que han quedado fuera. Programación y horarios, aquí.