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Desde que verbos como emplatar forman parte de nuestro cotidianeidad, toda la creatividad que rodea el arte culinario nos parece más que adecuada cuando hablamos de envolver con esmero los ingredientes y recetas que en sí, son también el resultado de un diseño para seducir a la vista y al paladar.

Disseny Al Plat  (organizada por la ADCV) es un goce visual con profunda significación porque ha aliado a chefs, artesanos y, por supuesto, diseñadores en la creación de platos (continente y contenido) únicos. El poder de las sinergias fluye en toda la muestra a través de las herramientas dispares pero comunes en sus objetivos porque como se señala en la creación de Ramón Arnau, Alejandro del Toro y Joaquín Cabedo, «una obra (plato) sin los alimentos, carece de sentido». Aunque su plato (como muchos de los expuestos) son bellos per se, incluso vacíos.

Foto: Fotogourmet.es

Ramón Arnau + Alejandro del Toro + Joaquín Cabedo. Foto: Fotogourmet.es

No hace mucho escuchábamos que sin el diseño los oficios morirán, por ello emociona comprobar la necesidad de que alguien moldee el hierro, sople el vidrio, de forma al grescón chamota, martillee el metal, moldee la médula de junco, cincele el latón, haga girar el torno de alfarero o tornee la madera de maple, para dar forma a estos platos singulares. ¿No perderíamos mucho si todos estas artesanías desaparecieran? Sin duda, y el diseñador es consciente del encanto de los contrastes: rescatar la tradición con un giro en su uso y formas para llevarla a nuevos caminos que auguren una larga vida. El plato de cerámica de Manises del s.XIV con múltiples alturas («Vertical Food», receta de Quique Barella) propuesto por Jorge Herrera Studio y moldeado por Arturo Mora Benavent, es un buen ejemplo. Concebido como una cajita de bento en estratos, que guarda la sorpresa de gambas cocinadas en tres maneras (tartar, salazón y a la llama), y reconfortadas desde el nivel inferior, por el humo denso del hielo seco.

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Jorge Herrera Studio + Quique Barella + Arturo Mora Benavent. Foto: Fotogourmet.es

La muestra es una propuesta expositiva de intimidad, y así, el visitante se arquea sobre los mostradores como si se tratara de una ceremonia culinaria con sorpresa. Porque la mesa depara los descubrimientos de las entrañas del plato creado que son los bocetos previos del diseñador y sus herramientas de trabajo. Bosquejos para ser admirados por sí solos, como los de la pieza cerámica proyectada por Gallega Design (cocinada por Raquel Pérez) con trazo exacto y a la vez delicado, para ser ejecutada en el taller de Juan Carlos Iñesta (Domanises). O pistas de los caminos recorridos por el diseñador, como en la propuesta de Nueve Estudio (aliados con el cocinero Toni Aliaga y la artesana Marifé Navarro) con su periplo por la iconografía de «Cañas y Barro», L’Albufera, los arrozales, para por fin, concebir un plato que aúna artesanía y diseño en un equilibrio difícil de conseguir.

Foto: Fotogourmet.es

Gallega Design + Raquel Pérez + Domanises. Foto: Fotogourmet.es

Incluido en el espacio como apéndice culinario, hay además una suculenta muestra gráfica que recorre la imagen de los restaurantes y bares que confiaron su aspecto a estudios de diseño.

Una exposición al servicio del arroz meloso con anguila o pato, remolacha y eneldo; de la coca de sardina, el arenque escalibado; de una hamburguesa de gambas de Dénia con pan de tinta de calamar; que tiene un olor yodado a atún ahumado con habitas tiernas; o a hierbas recién cortadas con un cremoso de mostaza; es una gran idea sobre el diseño de la felicidad.

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Nueve Estudio + Toni Aliaga + Marifé Navarro. Foto: Fotogourmet.es

«Disseny al Plat» permanecerá en La Nau hasta el 1 de marzo del 2015.