Elena Tormo

Soy Elena Tormo, ilustradora y diseñadora. Estudié música durante 10 años, solo para tener más márgenes de libros que dibujar. Me costaba tanto rellenarlos que no me dejaba tiempo para estudiar. Mi pasión es desordenar la vida y dibujar pensamientos. Mi sueño, seguir aprendiendo siempre. Mi trabajo como freelance es muy versátil: He publicado 2 libros de recuerdos para bebés, de la mano de MundoAvolar. Son libros de recuerdos destinados a familias de una mamá o dos mamás. Ilustraciones infantiles con aire muy fresquito, muy colorista. He realizado el diseño de varios discos de La Rana Mariana, Nu-Roots, Black Rice… y sobretodo de Los de Marras, muy distintos entre sí. Algunos más austeros, otros más coloristas, el diseño está ligado al carácter del disco en cuestión. Colaboro con el Circuito Café Teatro de Valencia con ilustraciones de humor que salen bimestralmente. He realizado muchos trabajos de identidad corporativa para diferentes empresas.

Cuando tengo tiempo libre intento presentarme a concursos, participar en exposiciones (como la de Ovidi Montllor de la Fira del Llibre de Valencia 2015) o hacer ilustraciones para el fanzine Tiro.

Un disco: El último más importante es, sin duda, «Surrealismo», de Los de Marras. Además de formar parte de la familia, me encanta haber presenciado todo el proceso completo del proyecto desde que nace una idea para una letra hasta el día que el disco sale a la calle (sin contar las noches y noches que he pasado diseñando el libreto).

Una película: «Mary and Max», de Adam Elliot. 2009. Más la veo más me gusta. Me encanta saber qué va a pasar en la siguiente escena.

Un libro: Ahora más que nunca, «El libro de los abrazos», de Eduardo Galeano.

Una serie de tv: No soy muy de series, tengo alergia al sofá. No sigo series de tv desde Twin Peaks en mi época de teenager.

Una serie de dibujos de tv: La Pantera Rosa, me sigue encantando cada vez que vuelvo a ver algún capítulo.

Una revista: En digital, Graffica. En papel, me parto de risa con El Jueves.

Un icono sexual: Me pones en un compromiso…

Una comida: Cualquier cosa en casa de mi iaia, aunque fuera un yogur caducado. Todo estaba más bueno cuando ella me miraba.

Un bar de Valencia: De antaño La Siesta, en El Carmen. El primer bar que conocí con libros, cómics, revistas y algo de humo.

Una calle de Valencia: Desde la calle paralela al río giras a la izquierda y contando 3 manzanas y sin despistarte, preguntas a varias personas sin prestar demasiada atención y al final llegas sin querer. Jamás me aprenderé los nombres de las calles.