Foto: Jose Bravo.

Foto: Jose Bravo.

Me llamo María Beltrán y soy la madre de Roc, un señor pequeñito de 5 años que me tiene enamorada perdidamente y al que echo mucho de menos porque me paso el día trabajando. El glamour del cine, lo llaman.

A finales de 2013, tras el cierre de Canal 9 metimos todo lo que nos cabía en un Seat Ibiza color azul lapislázuli y sin conocer a nadie nos vinimos a vivir a Barcelona. A los 37 años me vi haciendo de meritoria de dirección en una tv-movie. Nunca en Valencia había hecho ficción y de repente me di cuenta de que esto es lo que quería ser de “más” mayor. 2 años después con 5 pelis y 3 series de televisión a mis espaldas, deseo con todas mis fuerzas volver a casa a rodar algo.

Admiro a mis amigos, los que siguen en Valencia y lo hacen levantando proyectos bonitos contra viento y marea. Vosotros sí que sois unos héroes.
En Barcelona se está muy bien pero hubiera estado mejor venirse a vivir aquí por elección propia y no obligada.

Un disco: El casete que me regaló mi hermano Rubén, de Kaka de Luxe y Los Modelos el primer día que conduje el coche de mi madre tras sacarme el carné de conducir.

Una película: «El Rey tuerto». Por el tipo de proyecto que es, creo que es de lo que más orgullosa me siento en los dos años que llevo en Barcelona. La rodamos en 17 días y en dos versiones: catalán y castellano. Es una comedia negra que tiene muchos niveles de lectura pero sobre todo tiene cuatro actores en estado de gracia y unos diálogos brillantes. En Valencia tenéis la suerte de poderla ver en los nuevos Aragó cinema.

Un libro: «El barón rampante», de Ítalo Calvino. Me lo recomendó una amiga en un momento muy doloroso de mi vida y consiguió sacarme de allí durante el tiempo que me llevó leerlo.

Una serie de tv: «A dos metros bajo tierra». La recuerdo como la primera del boom series de calidad, que parece que fue ayer pero lleva 15 años.

Una serie de dibujos de tv: En estos momentos, El Inspector Gadget. La estamos viendo en casa con el petit y me sigo partiendo de risa como cuando era pequeña. Eh la qui va là, inspecteur gadget, eh la ça va pas, ouh ouh…

Una revista: AU Agenda Urbana. Cuando los que quieres como a tu familia luchan por llevar adelante un proyecto como este y lo consiguen durante 10 años, que se quite la Cuore. ¡Un Aarg por Virginia, Wilie, Dani, Sara y Gloria!

Un icono sexual: David Summers. No llegué a forrarme la carpeta con sus fotos, pero me quedé “Sufre mamón” durante un año hasta que los del videoclub vinieron a casa a por ella y nos multaron con no poder volver allí nunca más. Me sabía los diálogos de memoria.

Una comida: Mi abuela.



Un bar de Valencia: Cuando era pequeña y vivía en Dénia subíamos a Valencia unas 3 o 4 veces al año y siempre nos sentábamos en Casa Mundo y pedíamos un bocata de calamares. Con mahonesa, por supuesto. De mayor, me quedo con las noches de verano en la terraza del antiguo Bar Congo y el café granizado.

Una calle de Valencia: Doctor Sumsi. Fue la calle en la que viví durante 13 años hasta que nos tuvimos que exiliar a Barcelona. De hecho, cada vez que volvemos lo primero que hacemos es intentar buscar aparcamiento allí.