Este puente, Sala Russafa acoge el estreno absoluto de Ximpún. Del 10 al 18 de octubre la compañía valenciana Arden Producciones presenta una nueva pieza familiar que rompe la burbuja en la que a veces se aísla a los niños y niñas para hablarles, en tono de comedia, de una fase más de la vida: las despedidas.
Los cuentos clásicos han reflejado la muerte de manera recurrente, a veces incluso cruel, como una de sus enseñanzas para los pequeños. Pero en la época contemporánea, la sobreprotección ha hecho que la enfermedad o el deceso se obvien, que desaparezcan para evitarles posibles sufrimientos. Una realidad con la que Marian Villaescusa se topó cuando, diagnosticada de cáncer, pidió a los padres de sus alumnos de teatro poder anunciarles que tendría que dejar las clases por un tiempo. “Muchos querían que diera cualquier excusa antes que hablarles de que estaba enferma. Me hizo pensar en cómo se censuran ciertos temas. Y son cosas que, inevitablemente, todos vamos a tener que conocer de primera mano en un momento u otro, sin estar preparados”, señala la dramaturga. Sin embargo, en los grupos donde sí pudo comentar su situación con los niños y niñas, encontró un cariño, una comprensión y una curiosidad totalmente naturales.
Superada su enfermedad, Villaescusa ha reflexionado sobre este episodio para transformarlo en una pieza de teatro que, desde la comedia, trata de las despedidas. “Todos hemos tenido que pasar por perder a una mascota, a los abuelos, quizá a algún amigo u otro familiar. Es una parte más de la vida que en muchas culturas se festeja, se celebra con un espíritu totalmente distinto al occidental”, señala la autora. Por eso ha decidido incluir menciones a esas herencias culturales y situaciones cotidianas en la nueva comedia familiar de Arden.
Un equipo valenciano está detrás de esta historia protagonizada por mujeres, dos amigas bien dispares: Lira es una chica calmada y reflexiva, mientras que Marimba es pura energía y emoción. Juntas harán un viaje representación de un ciclo vital completo, lleno de momentos cómicos y en el que aprenderán a decir adiós pasando por todas las emociones que lo acompañan, desde la negación y la ira a la negociación, la tristeza y, finalmente, la aceptación.
La ilustradora valenciana Espinaca Explosiva da vida a los baúles de la escenografía realizados por Ricardo Alcaide, que acompañan a Lira y Marimba en su periplo. Las actrices Irina Bargues y Andrea Jara aportan toques de clown y desparpajo a sus interpretaciones, que incluyen baile en determinadas escenas. El vestuario viene de manos de Taller del Bosc y Pablo Fernández, junto a Josemi Felguera son los encargados de la iluminación. Todos conforman un equipo dirigido por Marian Villaescusa, quien vuelve a romper tabús tras el éxito de Shhhh!!!, otra comedia donde retrataba su experiencia con el cáncer, pero esta vez dirigiéndose al público adulto. “Creo que el teatro tiene que ser un reflejo de la vida y en la vida pasan estas cosas. Pero no hay porqué sentirlas necesariamente como un drama”, señala la autora y directora con una sincera sonrisa.