La exposición Pintar sin miedo llega a la Catedral de Burgos, con obras de Sorolla y artistas valencianos. Una celebración del arte.
La Catedral de Burgos acoge la exposición Pintar sin miedo. Joaquín Sorolla y la València de 1900. Esta muestra, organizada por la Archidiócesis de Burgos y el Cabildo Metropolitano, estará abierta al público hasta el 2 de marzo de 2025. Comisariada por Pablo González Tornel, director del Museo de Bellas Artes de València (MuBAV), reúne obras emblemáticas de Sorolla junto a piezas de otros artistas valencianos destacados.
La exposición presenta 32 obras, de las cuales 25 provienen de la Comunitat Valenciana. Entre ellas, destacan 22 piezas del MuBAV, además de una obra de colección particular y dos de la Colección Banco Sabadell. Las piezas restantes proceden del Museo Sorolla de Madrid, el Museo del Prado y la Colección BBVA.
Los visitantes podrán disfrutar de 15 obras de Sorolla, entre las que se encuentran Grupa valenciana, Clotilde contemplando la Venus de Milo y Labradora valenciana. Estas piezas se complementan con retratos, paisajes y escenas costumbristas que reflejan la vida rural valenciana, junto con representaciones de la Catedral de Burgos pintadas por Sorolla en 1890 y 1910.
En el marco de esta exposición, las obras de Sorolla dialogan con las de otros artistas valencianos de su época, como Pinazo, Benlliure, Agrasot y Fillol. Estas piezas destacan por su modernidad y su tratamiento innovador de géneros como el retrato y el paisaje. Además, se exhiben esculturas de Mariano Benlliure y José Capuz Mamano, que enriquecen esta panorámica de la escuela valenciana de entresiglos.
La muestra se complementa con un catálogo científico que analiza la escuela valenciana y revisa los estereotipos historiográficos sobre el arte de este período. Textos de especialistas como Luis Alberto Pérez Velarde, Vicente Pla Vivas y Gloria Martínez Leyva acompañan esta visión crítica.
Esta exposición es una oportunidad única para conocer el legado artístico de Sorolla y su impacto en la cultura española de finales del siglo XIX. La Catedral de Burgos se convierte en un punto de encuentro para disfrutar del arte valenciano en un contexto histórico incomparable.