Cuestionarios verdes a Pablo Maronda, Paula Bonet o Fani Grande; vídeos donde explican cómo hacer horchata, cuáles son las herramientas de un apicultor o una guía de aves; rutas por diversos pasajes valencianos como el Penyagolosa; artículos y reportajes con los que recorrer el mundo con otros ojos. Todo eso en una revista. Existe. Se llama Espores, es digital, gratuita y está editada por el Jardín Botánic de la Universidad de València.

Detrás de ella, Elisa Caballer, Inés Perales y Eva Pastor, «aunque quienes de verdad hacen importante la publicación son nuestros generadores de contenidos: naturalistas, divulgadoras, científicos, investigadoras y una larga lista de profesionales que comparten con nosotros sus viajes, sus aficiones, su trabajo y sus ideas», especifica la propia Pastor.

¿Qué es Espores, entonces? «Siempre vendemos Espores como “la veu del Botànic”, y eso es lo que pretendemos ser, una publicación que el Jardín Botánico de la ciudad ha creado para hablar de plantas. En ella abordamos la botánica desde todos los puntos de vista posibles: investigación, conservación, ocio, agricultura, jardinería… Cualquier contenido verde es susceptible de aparecer, desde un jardín precioso en Nueva York, hasta una excursión a la Albufera, pasando por la aromaterapia, el último congreso de paisajismo o las mejores manualidades para hacer con cactus. Pasen y lean».

Hagan caso del consejo, porque Espores es una publicación altamente recomendable tanto por la calidad de sus contenidos como por su labor editorial a la hora de generarlos. Una apuesta muy interesante que ayuda a que la web de un espacio sea algo más que un simple contenedor de programaciones o la llamada información útil.

Espores se actualiza tres veces por semana: los miércoles, los viernes y los domingos. Y lo hacen con «contenidos variados, por eso hacemos vídeos, entrevistas en profundidad, artículos temáticos de periodicidad mensual, y los cuestionarios verdes breves a personajes relacionados con el Botánico o la ciudad, pero que profesionalmente no tienen nada que ver con la botánica o la Naturaleza».

De izquierda a derecha, Eva Pastor, Elisa Caballer e Inés Perales.

Como ya se habrá dado cuenta el lector más avispado de Verlanga, casi siempre las buenas ideas surgen por casualidad. «Nos reunimos con unos compañeros para mejorar la comunicación del Jardín a través de un boletín y acabamos hablando de la posibilidad de crear una revista. Vicente Sáez, alguien con muchísimas ideas, nos dejó la propuesta sobre la mesa y no pudimos resistirnos».

Además, la creación de la revista entroncaba con una de las misiones de sus responsables, la de «atraer al público hasta nosotros para que disfruten de todo aquello que podemos ofrecerles, colecciones botánicas de una gran riqueza y diversidad, y un entorno idílico en el centro de la ciudad. Pero también debemos llevar fuera de nuestras hectáreas nuestros contenidos, por eso Espores es básicamente una herramienta más de divulgación y comunicación de la botánica».

¿Saldrá alguna vez en papel? «Es una publicación online y no vemos sentido a su paso al papel. Aunque sería bonito generar alguna vez un ejemplar puntual con los mejores contenidos de casa sección. Apunto la idea mentalmente tal y como voy contestando a esta pregunta». Mientras, lo que es seguro es que 2018 traerá un rediseño de la web.

Espores ha nacido a la sombra del Jardín Botánico de la Universidad de València y eso significa que también aporta su granito al relato de la ciudad. «El Jardín Botánico es una joya de la ciudad, un espacio para la conservación, la investigación, la docencia, pero también el ocio y la cultura. Que València tenga un Botánico entre su patrimonio es una gran noticia. Espores habla de ese Jardín y también del trabajo que todos los Jardines Botánicos del mundo hacen por nuestro entorno natural».