Charlie Pee. Foto: Claudia Serrahima.

Diez años lleva ya Charlie Pee haciéndonos reír. Licenciada en Traducción e Interpretación, dejó los textos ajenos por sus propias historias. Stand up, radio, televisión…La Resistencia, El Carolate, Comedy Central, Las que faltaban, Phi Beta Lambda, Catalunya Radio… Y ahora su primer show en solitario, Mamasita (La Rambleta, 10 de noviembre). Una hora en la «que se ríe de las miserias más absolutamente terribles que le han pasado a lo largo de la vida».

¿Cuál es tu primer recuerdo de algo que te hizo reír?

El prime recuerdo que tengo, o el primero que me viene a la cabeza, es mi padre imitando a Jim Carrey.

Y ahora, ¿qué cosas te hacen gracia?

Me hacen gracias muchísimas cosas. Mi perra me hace mucha gracia. Mis amigos me hacen reír mucho, son muy graciosos. Me hace mucha gracia una caída, puede ser muy cómica. Me hace mucha gracia siempre cuando a alguien le pasa algo terrible y lo cuenta de forma graciosa y se ríe. Eso es de lo que más gracia me hace en el mundo.

Si hablamos de comedia en España, ¿de quién te encuentras más cercana?

Me siento muy cerca, por tocar temas personales muy íntimos, sentimentales, de salud, de Ignatius Farray. Me encanta porque toda su comedia se basa en su vida, que es un poco lo que a mí me gusta hacer. Si hablamos a nivel de energía, de movimiento, me siento muy cerca de Iggy Rubín. Valeria Ros también sería como un mix entre las dos cosas porque habla mucho de ella y de sus problemas y me gusta su energía en el escenario.

¿Y a nivel internacional?

Mi favorita siempre ha sido Sarah Silverman. Al cabo de unos años de descubrir a Silverman descubrí a Katherine Ryan. Son dos cómicas que me hacen reír muchísimo. También me gusta Jim Jefferies. Hay muchísimos, pero estos tres son gente que habla mucho de sus cosas, que es la comedia que más me gusta ver.

¿Crees que la comedia está, en todos los sentidos, infravalorada?

Sí, sí que lo está. Por ejemplo, las películas que son comedia están consideradas más chorras que las dramáticas. Payaso es una palabra que se utiliza como un insulto, cuando es dificilísimo ser payaso

¿Qué recursos tienes y utilizas (la repetición, la pausa dramática-cómica, el insulto /la palabra escatológica en el momento inesperado,…) que sabes que siempre acaban arrancando risas o carcajadas?

Utilizo recursos, pero… por ejemplo el insulto, decir «hijos de puta», no es un recurso que utilice para hacer reír, sino que me sale, la intención no es hacer reír, sino que es un modo que tengo de expresarme. También hago alguna vez, una o dos en cada bolo, lo de repetir una frase dos veces, hacer una pregunta y decir que la voy a repetir por si no hubiera quedado claro, pero no es tanto porque vaya a provocar una risa, que no la produce, sino porque genera una expectación de lo que va a venir luego. Sí utilizo recursos para eso, para generar más expectación, o para llamar la atención, pero nunca porque crea que se van a reír con ello. Nunca sabes cuándo se va a reír la gente.

¿En qué formato te encuentras más a gusto (monólogo, guión, radio, televisión, …)?

Sin ninguna duda, y es con el que empecé, mi formato favorito, y en el que me siento más cómoda, es el stand up. Todos los otros formatos me han venido luego gracias a gente que me ha descubierto haciendo stand up. Y así empecé a hacer guiones, empecé en la radio, en la tele…

¿Qué importancia le das al guión en los monólogos? ¿Absoluta fidelidad o es el esqueleto al partir del cual ir improvisando?

El guión en el stand up…buena pregunta. Como persona que no tiene redactado ninguno de sus bloques, y ahí puede que tengas la respuesta, creo que es muy importante saber lo que vas a decir. Los chistes sí los escribo porque tienen que estar bien construidos, pero no tengo un guión redactado. ¿Por qué? Primero, porque el stand up es algo que se hace oralmente y creo que la mejor manera de trabajarlo es hablándolo sola en mi casa, que es como lo voy a hacer luego en el escenario. Segundo, porque cuando tienes un guión redactado, cuando lo lees estás como memorizando, recitando un texto que estás viendo en tu cabeza porque lo has escrito antes y eso para mí hace que pierda mucha naturalidad. En los otros formatos sí, pero en el stand up no me escribo guión, tengo claro lo que voy a decir, hago una escaleta de las ideas, cuando lo pruebo por primera vez me grabo, lo escucho y voy viendo si en algún momento he dado muchas vueltas… para conseguir que sea más directo. Pero no lo redacto para que no parezca que estoy recitando, sino contando algo de verdad, como una anécdota como se la contaría a mis colegas.

Mamasita se presenta como tu primer show largo en solitario. ¿Es un grandes éxitos de monólogos anteriores, algo escrito totalmente nuevo, una mezcla…?

No concibo que en el stand up haya monólogos, los cómicos vamos explicando cosas. Durante muchos años he hecho shows compartidos con otros cómicos donde contaba lo que me estaba pasando en ese momento. Yo quería que mi primer unipersonal, digámoslo así, fuera algo muy personal, de cosas que me han ido pasando a lo largo de los años. Lo he ido trabajando sabiendo que algún día sería eso, pero no hay refritos. A mí me pasa hoy una cosa y si subo a un micro abierto la explico y si gusta y me invitan esa semana a actuar en otro sitio la vuelvo a contar. Pero no es como si tuviera tres monólogos y los junto y son refritos, no, voy contando lo que me va pasando.

En Mamasita sí había una intención de contar estas cosas que me han pasado en mi vida, que me parecen fuertes, y que me han hecho ser quien soy, unificarlas en una hora para contarlo, pero como digo es que no concibo el stand up como un refrito … o como tengo varios monólogos y ahora hago uno… No, me van pasando cosas y las voy contando.

En Mamasita, como dices, cuentas tus propias experiencias, tu vida. ¿Reconoces de alguna manera cuando te pasa algo que eso será carne de show, fuerzas las cosas para que pasen cosas y contarlas después?

Gracias al stand up he aprendido que la vida solo me puede ir bien porque pueden pasar dos cosas: cuando algo me va muy mal lo puedo convertir en comedia y eso al final es algo bueno para mí; o me pueden ir directamente bien las cosas y eso no tiene ningún interés. Nunca he forzado nada para tener una experiencia que después pudiera contarla en un stand up. A mí me pasan cosas y tal como me pasan las cuento. Siempre que me pasan digo «buah, esto va a ser un bloque seguro», pero nunca he forzado absolutamente nada para ver si consigo que una situación sea más cómica, no, son tal y como pasan.

Teniendo en cuenta que tu show gira en torno a tus vivencias, ¿cuándo subes a los escenarios eres Charlie Pee o Carlota Palà?

Charlie Pee no es un personaje, ni un seudónimo. Charlie Pee soy yo. Charlie Pee es como me llaman toda la vida, desde pequeña. No es ningún nombre artístico. Antes de hacer monólogos ya era Charlie Pee. En mis redes era Charlie Pee, siempre lo he sido. No hay un personaje, soy yo con las cosas que me pasan tal cual.

Eres, también, el 50% de 2manyzorras

2manyzorras nació porque Ari (Ariadna Oski) y yo nos conocíamos del bar de los amigos de toda la vida. Yo tenía un novio que pinchaba muy bien y le pedí si me podía enseñar, lo hizo y algunas veces pinché en ese bar con él. Ella pinchaba con su novio también, que estaban aprendiendo a la vez. La misma semana nos dejaron nuestros novios y Ari me propuso pinchar juntas a la semana siguiente porque tenía un bolo con su novio, pero como ya no estaban juntos no lo iba a hacer y yo le dije que vale, en plan «uf, venga». Empezamos a quedar para preparar el bolo y para llorar porque los novios nos habían dejado. Así nació 2manyzorras. Y pinchamos mucha música electrónica, tecno, un poco de trance, estamos muy tranceras últimamente.