«Hay días que mi cuerpo es / una caja sin fondo / tengo miedo a quedarme / … vacío / y que ya no tenga nada / dentro de la cabeza» cantaban Ciudadano López (Jorge Pérez, Xema Fuertes, Gerardo Llorens y Álvaro del Hierro) en «La caja sin fondo», tercer corte del LP «Starsky & Hash». Letra y melodía que, deudoras de Surfin’ Bichos, son un viaje de ida a los años de la post-eclosión indie, de la Explosión Naranja en Valencia, de noches que no se acababan,… Ciudadano López luego fueron Ciudadano a secas, y ahora cada uno defiende una historia musical diferente. Pero es tiempo de hablar del pasado. Jorge Pérez aparca a Tórtel y Coleccionistas y se mete en la máquina del tiempo.
«Starsky & Hash», Ciudadano López (Matarile, 1997)
Ya han pasado más de diecisiete años desde la publicación de «Starsky & Hash», y me he dado cuenta de que sobre todo me vienen a la cabeza un montón de recuerdos banales (que me temo no interesarán demasiado), pero que para mí son maravillosos. Finalmente, he pensado que podría ser divertido basarme en la estructura del «Je me souviens», de Perec, para ir amontonando un poco sin ton ni son todos esos recuerdos.
Me acuerdo de Xema y su álbum de cromos de Star Wars.
Me acuerdo de Dani Cardona y de todo el cariño y tiempo que puso en nosotros y cuánto aprendimos de él.
Me acuerdo de los estudios Experience de Alboraia, del escritorio que había en la entrada, del Hammond que había al lado de ese escritorio, y de que al lado del Hammond estaba la puerta para entrar a la pequeña sala y a la pecera de grabación.
Me acuerdo de la grabadora de cinta. También de la mesa no automatizada y de que en las mezclas del disco, Dani no daba abasto subiendo y bajando faders. Muchas veces cada uno se encargaba de su propia pista. Qué disparate más divertido.
Me acuerdo de Bala.
Me acuerdo de ver en las estanterías del estudio bobinas de Furious Planet, Doctor Divago e Insania.
Me acuerdo de Dani Cardona sacando pedales de efectos y que a nosotros todos nos parecían mágicos.
Me acuerdo de que por el estudio había varios ejemplares de la revista Wah Wah y también de On the Rocks. En una escribía sobre nosotros César Campoy y salíamos posando en los baños de Roxy, fotografiados por Liberto Peiró.
Me acuerdo de Álvaro grabando baterías con una cara de concentración que ya no le he vuelto a ver en la vida.
Me acuerdo de Gerardo preocupado por sus exámenes de tercero de BUP.
Me acuerdo de Julio Milla y de Isa Terrible pasándose por el estudio, cantando y tocando en algunas sesiones y haciéndonos disfrutar mucho de la grabación. Siempre nos decían cosas bonitas sobre las canciones.
Me acuerdo de lo increíblemente bien que ya entonces tocaba la guitarra Xema y de lo que nos gustaba la máquina de coches que había en La Sendra.
Me acuerdo de Manolo Bertrán grabando una guitarra en una canción que se llamaba «Melquiades», que a mí me encantaba y que debe de hacer casi diez años que no he vuelto a oír.
Me acuerdo de Isma Rumbeu haciendo la portada a partir de una foto de juventud que encontramos de los padres de Dara. Salían muy fardones a toda pastilla encima de una Triumph que por lo visto no era suya y ni siquiera estaba en marcha.
Me acuerdo de haberme llevado una cinta de casete con las primeras mezclas y esperar la opinión de mi amiga Elena.