Lanuca. Foto: María Carbonell & Susana Godoy.

El denostado 2020 también nos está regalando algunas alegrías. Por ejemplo, las canciones nuevas que Lanuca va presentando. Primero fue Cocodrilia, después llegó Despertar y ahora es el turno de Colmillos, cuyo vídeo estrenamos, hoy en exclusiva, en Verlanga. La dirección artística del mismo ha corrido a cargo de Mònica Llop y el montaje es de Fran Cliffhanger.

La letra y música es de Ángela Bonet y la canción ha sido grabada y producida (como las dos anteriores) en Estudi Nàutic (València) por Jordi Sempere. Con Ángela al sintetizador y la voz, y Manolo Bertrán a las guitarras, Colmillos respira «electrónica intimista, con recursos que recuerdan a los coros de las cantantes pop más clásicas de los años 50 y 60», pero sin dejar de lado ese adn Lanuca de canciones que reconforta escuchar o entrar en su universo, calmas, vaporosas incluso, pero que al mismo tiempo provocan cierta inquietud.

Un verso de la canción es su mejor resumen, «un disparo cierto que no deja de sangrar». Es una de las muchas imágenes que propone y transmite la letra. Unos colmillos listos para conversar, un bosque animado imposible de talar, un día perfecto que no puedes recordar. Cantado por una voz que maneja cada palabra como si fuera una marioneta, las estira, las susurra, las amplifica.

La idea es que las tres canciones «formen parte de un todo en algún momento, se construyen con esa idea y con esa ilusión», nos cuenta Ángela. «Es verdad que el sabor del proyecto en estos últimos tiempos ha cambiado. Esta es prácticamente la única forma que tienen de salir a la luz en estos tiempos oscuros. Estas canciones, con sus respectivos vídeos salen así porque sigo creyendo que es un proyecto bonito y puede alegrarle el día a alguien». Dale al play y verás que no miente.