Marta Domingo (Meridian Response, Odd Cherry Pie) y Alex Vidal (Alien Tango) son Fru Katinka, canciones con base pop y aderezos electrónicos, r’n’b, trazas de hip hop, pasajes de dreampop, música urbana bien entendida. Tan abiertos estilísticamente como a la hora de escuchar música. Ellos son los protagonistas este mes de nuestra sección Los discos favoritos de… y como dúo bien avenido cada uno elige cuatro álbumes.
The Visitor (Kadhja Bonet, 2015)
(Alex) Este disco para mí es como medicina, tengo una conexión muy alta con Kadhja y con sus canciones. A camino entre una banda sonora de los 50 y una canción pop neo soul, creo que su elegancia y su grandiosidad me apabulla e inunda a cada escucha que le doy. Me ha ayudado mucho en momentos difíciles y es uno de esos discos y artista que no puede compararse ni encontrar algo parecido. Es pura magia Kadhja.
Innervisions (Stevie Wonder, 1973)
(Marta) Stevie Wonder creo que ha sido una referencia para muchos de los artistas que actualmente escucho y veo este disco en concreto como una joya que representa muy bien la genialidad compositiva e interpretativa de este artista.
Magical Mystery Tour (The Beatles, 1967)
(Alex) Seguramente la banda con más influencia de la historia en el Pop. Su discografía es la hostia y podemos ver una gran evolución y una multitud de estímulos diferentes que siguen siendo acordes a los sonidos de ahora, y es que han sido y serán los maestros de todo lo que les ha seguido hablando de Pop. Quizás lo pongo como disco favorito porque tiene mi canción favorita de ellos Blue Jay Way o I’m the Walrus, es un disco muy animado y variado donde podemos disfrutar de clásicos y de gérmenes de estilos que se desarrollarían en el futuro.
Post (Bjork, 1995)
(Marta) Pocos discos me han transmitido tanta energía como este: rítmicamente es muy poderoso e incluso frenético pero sin llegar a ser saturante, las melodías de todas las canciones me emocionan como pocas y, en general, este disco es un claro ejemplo de como ser experimental sin alejarse de la pura esencia del pop. Además fue el responsable de introducirme en el universo único e intrigante de Bjork, a quien considero una de las mejores artistas contemporáneas.
To Pimp A Butterfly (Kendrick Lamar, 2015)
(Alex) Lo de Kendrick en este disco es una obra maestra, es un disco muy beatlelesco y no por el sonido, sino por la calidad y lo atemporal de su sonido. Es un disco que marcó un antes y un después en el género y subió a Kendrick al Olimpo de los artistas. Para mí es un disco que quemé y disfruté muchísimo y fue mi iniciación con el hip hop, ya que mezclaba estos ritmos con otros más conocidos por mí y porque su elegancia y gancho pop era muy difícil de resistir.
Melody’s Echo Chamber (Melody’s Echo Chamber, 2012)
(Marta) Tal vez haya escuchado 200 veces este disco y representa una parte importante de mi relación con aquella música que me hace entrar en un estado entre meditativo y melancólico. Es un refugio en un universo paralelo al que necesito ir de vez en cuando.
Adromicfms 4 (Yung Beef, 2018)
(Alex) Yung Beef es Messi, y al igual que en el futbol tenemos a Cristiano, en la música tenemos a Tangana. Cada vez que abre la voz Fernandito es una enseñanza y un disfrute. Su estilo único y su poder de creación y evolución no tiene fin. Desde Pxxr Gvng con canciones como Cigala que quizás es de mis canciones trap favoritas españolas, hasta El Plugg o la última 101 dalmatas, Yung Beef ha sido precursor de todo y dueño de nada, abre la veda y deja que la gente se nutra mientras él sigue hacia delante siempre.
Este disco fue un golpe sobre la mesa, una lección y quizás el álbum que me hizo entrar de lleno en estos ritmos y dinámicas trap. Pero no hay que olvidar que este disco es perfecto en cuanto la unión de trap, reggaeton y pop. Desde Me perdí en Madrid, Cryign’ for pxxr love 3 o el pelotazo reggaeton Infierno, el disco hizo bailar y espabilar a la escena, dando temas underground pero con un poder masivo impresionante.
Quizás mi tema favorito o el que más me ha influenciado es Rosas Azules, un tema abrumador tanto en temática como musicalmente, donde Steve Lean hace del sonido rave de synths un tema frenético y sentimental.
A Seat at the table (Solange, 2016)
(Marta) Descubrir a Solange fue para mí el inicio de una nueva etapa musical en la que comencé a conectar más con el R&B actual. Es un disco exquisito en el que tanto las texturas como el espacio melodico-harmónico están muy cuidados. Nada es mediocre y cada canción, siendo singular, te lleva a través de un hilo narrativo bastante homogéneo.