Mad Robot no engañan a nadie. Tampoco buscan ninguna fórmula mágica. Su ecuación distorsión + melodía, con indie rock noventero en el horizonte, es su columna vertebral. A partir de ahí lo que les importa es hacer buenas canciones. Las doce de su cuarto disco, Punch Me, Kiss Me, Fuck You (Endoftheworld Records, Borx Records), se mueven entre los presagios oscuros de las letras y la escapista luminosidad melódica que se filtra por todas ellas (incluso en los pasajes más tenebrosos como Horrible Day o Culturcide).
Un álbum que se ha hecho esperar porque el disco duro en el que lo almacenaban dejó de funcionar y tuvieron que regrabarlo todo. Este contratiempo no ha acabado afectando a unas composiciones que se mueven entre estructuras que va in crescendo, tormentas sónicas bien conducidas, cambios de ritmo contagiosos, una estupenda combinación de voces que gana toneladas cuando cantan al mismo tiempo y un aire pop (Everything Sucks y más power en Shit Present o Poser) irresistible.
Mike Grau firma todas las canciones, excusa perfecta para que nos cuente cuáles son sus discos favoritos.
Canned (Lost Boy?, 2015)
Davey Jones es un tío de Long Island que tiene un proyecto basado en grabaciones caseras y donde muchas veces toca él varios instrumentos, varios singles y varios LPs. Desde siempre me flipó su manera de hacer canciones. En este disco regraba algunos de sus primeros singles y se marca un discazo repleto de lowfi/punk brutal. No le sobra ni una de sus 11 canciones, guitarras buenísimas y estribillos de otra época. Es también un gran dibujante y se curra todo el arte de su banda, es como un Walt Disney del inframundo.
Attack On Memory (Cloud Nothings, 2012)
Otro de esos discos que me parecen icónicos de estos últimos años. Ralentizados, oscuros, catárticos y producidos por el maestro Steve Albini. Dylan Baldi es uno de los mejores compositores de rock alternativo de nueva hornada, y creo que Jason Geryz es sin duda uno de los mejores baterías del momento. En este disco están muchos de sus himnos de punk lento y desgarrado. Sus guitarras son también de las más personales de estos últimos tiempos.
Return To Love (LVL UP, 2016)
Se juntan cuatro genios Nick Corbo, Mike Caridi, Dave Benton y Greg Rutkin, sacan varios discos desde su propio sello y terminan fichando por Subpop para hacer esta obra y separarse para emprender cada uno su camino. Un disco que probablemente será valorado con el tiempo, tienen todas las influencias del mejor rock noventero norteamericano, pero se las llevan a su terreno y hacen algo con sello propio. Fuzz pop donde van cantando canciones los tres y donde todo son gemas. En otra época lo hubiesen petado.
Teens Of Denial (Car Seat Headrest, 2016)
Quizás el mayor genio de la actualidad, Will Toledo graba en el sótano como 10 discos autoproducidos y subidos a Bandcamp antes de que Matador lo fiche y lo ponga donde debe estar. Digamos que el chaval tiene veintipocos y este es su disco más maduro, casi nada. Canciones de desarrollos extraños, largas, depresivas, oscuras, letras impropias de alguien tan jóven. Me encanta desde hace muchos años, todo lo que hace rebosa talento y buen gusto. Este disco también es Biblia del nuevo rock alternativo.
Strange Peace (Metz, 2017)
Los herederos de Nirvana en su faceta menos popera, son una muralla de sonido. Pasaron aquí por las manos de Albini e hicieron un discazo de riffs hipnóticos y repetitivos con la brutal batería de Hayden Menzies amplificada por la poderosa producción. Es trallazo tras trallazo, Turbo Rat a toda hostia y un estilo que ya ha creado escuela. Hayden también es el artista responsable de la imagen del grupo. Es esa banda que siempre soñé que fuese producida por Steve Albini.
Bored Nothing (Bored Nothing, 2013)
Fergus Miller grabó en su casa con un cuatro pistas este disco en 2012 y se convirtió en una de las esperanzas de nuevo rock alternativo, tan ruidoso como un buen grupo shoegaze, tan guitarreramente pop como cualquier banda de Flying Nun. Depresión y decadencia juvenil que le llevó a suicidarse poco tiempo después. Es un disco perfecto para los amantes del mejor lowfi y de Eliott Smith, sus canciones están inundadas de desasosiego y una atmósfera de ruido etéreo.
Some Things Last Longer Than You (Doe, 2016)
La mejor banda londinense de estos úitimos años fue sin duda Doe. Nicola Leel capitaneaba este trío como si fuera Kim Deal, tremenda a las guitarras y a la voz. Influenciados por el punk y todo este tipo de bandas noventeras, cercanos a Pixies y Breeders, pero con espíritu propio. Dos guitarras y una batería y un disco perfecto lleno de potenciables hit singles, combinaciones de voces masculinas y femeninas y potencia a raudales. Rendido a ellos desde la primera vez que los escuché.
Cheer (Drug Church, 2018)
Si mezclas a una banda de hardcore punk con los Pixies y la dotas de melodía y estribillos tenemos a Drug Church. Me enloquece esta combinación de potencia instrumental, el rollo vocal de su cantante y saber darle gracia a todo este batido. Cheer suena tremendo y todos sus temas son molones. Temas como Avoidarama son clásicos instantáneos para mover la cabeza con tus amigos.