Taiat Dansa

Somos Meritxell Barberá e Inma García, o lo que es lo mismo, Taiat Dansa. En 2003 decidimos quedarnos en Valencia para crear aquí una compañía y dedicarnos profesionalmente a la danza, pese a ser conscientes de que eso supondría mucho más esfuerzo para lograr visibilidad y rentabilidad con nuestro trabajo. Desde entonces hemos creado más de una docena de espectáculos que hemos bailado por diferentes teatros y festivales en España, en otros países de Europa y en Estados Unidos. En los últimos años, además, trabajamos para otras compañías de danza a nivel internacional para las que creamos piezas con nuestro sello artístico y coreográfico. Interesadas en la gestión cultural, hemos puesto en marcha distintas iniciativas que echábamos en falta en Valencia a través de nuestra empresa GmExpresa. La última, y de la que más orgullosas estamos, el Festival 10 Sentidos, que estos días celebra su quinta edición.

Algunas de las grandes ideas de Taiat se han cocinado en bares y restaurantes, muchas coreografías han surgido con el menú de Atmosphère, Dukala y Matilda. Siempre con libreta y boli encima de sus mesas mientras saboreamos sus fabulosos platos.

1.- Atmosphère (C/ Moro Zeit, 6)

Siempre que llegamos a la terraza del Instituto Francés, Emmanuelle nos hace sentir como en casa. “¡Aquí vienen mis chicas guapas bailarinas!”, nos grita al vernos. No hay mal día que no se arregle así. El lugar es agradable y tranquilo, nos pilla muy cerca de nuestro local de ensayo (que lo tenemos en la calle Teixidors) y está muy bien de precio. Y, por encima de todo esto, la comida está sabrosa y es muy sana. ¿Qué más se puede pedir? Las cremas de verduras las bordan, hacen una pasta con alcachofas que está riquísima, el ragout de ternera les queda impresionante y es imposible resistirse a pedir de postre la tarta tatín. Se nos abre el apetito sólo con citarlos. Si por algo se esfuerzan en Atmosphère es por ser variados en las propuestas cada día y por sorprender a sus clientes, que somos muy fieles. Bon appétit!!!

2.- Dukala (C/ Dr. Sanchis Bergón, 27)

Somos fans de Dukala desde que abrieron en pleno barrio del Carmen y lo hemos seguido siendo en su local en la calle Sanchis Bergón. Para quien no lo sepa (¿queda alguien?) es el mejor restaurante de cocina marroquí que hay en Valencia. Todo lo preparan con mimo y lo sirven con cariño. Y esa combinación es infalible. El que mima en la cocina es Nordin, con una mano impresionante para cada plato. Si tuviéramos que elegir nos quedaríamos con el cuscús, la bastela y los briouats de queso. Pero cuesta escoger. El que reparte cariño entre las mesas es Juan, que es quien atiende, recomienda y ayuda, un brillante jefe de sala. Nos encanta comer, pero nos influye mucho para escoger un lugar que nos sintamos en él a gusto. Y Dukala derrocha calidez gracias a Juan, Nordín y su maravilloso equipo.

3.- Matilda (C/ de Roteros, 21)

Nos ha salido una selección de restaurantes de lo más cosmopolita, pero ha sido pura casualidad. Rufo, el dueño de Matilda, en la calle Roteros, es argentino y es amigo de la compañía desde hace años. Aunque sin ser consciente del todo ha asistido a la gestación de muchas obras, la resolución de algunos problemas y al lamento de unas cuantas penas. De todo ha habido en sus mesas. Este restaurante sirve un menú diario buenísimo y especial. Si pensamos en él nos acordamos enseguida del arroz meloso con pollo y setas que preparan o de la coca de verdura. Por su disposición es además un espacio excelente para organizar comidas de trabajo. Con esos platos es imposible que no podamos convencer a alguien para cerrar un buen trato.

 

Este artículo fue originalmente publicado en el numero dieciseis de la newsletter Paladar que, todos los jueves, llega al correo de sus suscriptores. Para apuntarse gratuitamente ir aquí.