La ilustradora chilena propone una imagen abstracta y simbólica para el festival, con referencias a la luna, el espejo y la fascinación del cine.
La ilustradora chilena María Jesús Contreras es la autora del cartel de la 40ª edición del festival Cinema Jove. La pieza fue presentada en la Sala 7 del Teatre Rialto de València y representa una síntesis visual del poder evocador del cine a través de símbolos como la luna, el espejo y las miradas.
Según la autora, el cartel «nace desde una transformación: de una idea local a una propuesta más abierta, abstracta y amplia, que permite múltiples interpretaciones y conecta con una visión más universal». La obra se apoya en una estética que actualiza códigos vintage y propone una lectura simbólica del acto de mirar cine.
La ilustradora considera que la imagen gráfica del cartel actúa como «puente entre el arte y el diseño» y señala que el proceso creativo pasó por diferentes versiones hasta alcanzar una forma que pudiera hablar de lo cinematográfico desde lo simbólico y lo emocional.
La obra gráfica incorpora referencias vinculadas históricamente a Cinema Jove, como la luna —símbolo del festival—, el público entendido como creador y espectador, y la pantalla como superficie de proyección e interpretación. La propuesta sintetiza, en palabras de la dirección artística, la intención de conectar los lenguajes clásicos con una mirada contemporánea.
La presentación incluyó también la proyección de los cortometrajes Turnaround (2024), de Aisling Byrne, y Une nuit particulière (2023), de Enzo Martinez, títulos seleccionados por el festival.
María Jesús Contreras, nacida en 1993 en Temuco, trabaja de forma regular para medios como The New York Times, The Washington Post, The New Yorker o The Economist, y para marcas como Gucci, Hermès, Apple o Penguin Random House. En 2022 fue reconocida con el premio YoungGuns de The One Club for Creativity, y en 2024 fue jurado de los Premios ADC y seleccionada por Forbes entre las 50 mujeres más poderosas de Chile.
Entre sus referentes cinematográficos figuran Magnolia (1999) de Paul Thomas Anderson y Los Tenenbaums. Una familia de genios (2001) de Wes Anderson, películas que destaca por su fuerza narrativa y estética desde una mirada autoral joven.