Toni Cosin. Foto: Iván Navarro.

Soy Toni Cosin y nací en el 68 en París, supongo que eso explica muchas cosas. Llegué a Valencia a los 6 años sin tener ni idea de castellano y tras pasar por un buen montón de peripecias (unas sórdidas, otras divertidas, pero todas instructivas), acabé estudiando Diseño Gráfico a la vez que trabajaba como mensajero y camarero de discotecas. De ahí mis grandes pasiones, las motos, la música y el arte.

Después de pasar por la mili (tengo el honroso título de ser el segundo individuo con más arrestos de la base de Manises) monté una empresa de mensajeros con la que me forré hasta que llegó internet y sus mails.

Volví al diseño y trabajé como freelance hasta que entré a formar parte del frenético mundo de las agencias de publicidad como Director de Arte, pero el stress se encargó de hacer que se me cayera la barba a rodales y decidí montar un pub en Cuenca, el famoso Lavapiés.
De vuelta a Valencia y tras un tiempo aquí me fui a Tenerife a montar una galería de arte, algo que volvería a hacer en Patraix algún tiempo más tarde.

Todas esas experiencias y la organización de eventos artísticos me dieron las armas necesarias para meterme en otras lides mas interesantes como los festivales de arte y otros saraos culturales. Un dia llegó Andsons Producciones a mi vida para quedarse, eso sí, sin dejar nunca el diseño gráfico ni las motos entre concierto y concierto.

 

Un disco: Wish de The Cure. A mi juicio uno de los mejores discos de la historia que nunca dejo de escuchar, aunque también podría citar The Rise and Fall of Ziggy Stardust and The Spider from Mars de David Bowie.

Una película: Pulp Fiction, debo haberla visto cientos de veces y no me canso.

Un libro: Héroes de Ray Loriga. Me parece magnífico y ha sido durante mucho tiempo mi libro de cabecera. Lo he comprado y me lo han regalado un montón de veces, y de tantas veces que lo he prestado no conservo ningún ejemplar.

Una serie de dibujos de tv: Evidentemente Mazinger Z, todo un clásico, aunque he de citar, sin ser dibujos, a los Fraggle Rock, me encantaban.

Una revista: No suelo leerlas, pero hace años devoraba y coleccionaba El Europeo, era una ventana al mundo en la época. Y cómo no, El Víbora.

Un icono sexual: Me chifla Christina Hendricks, aunque no le haría ascos a una cita con Mónica Bellucci.

Una comida: El primer arroz al horno que me hizo mi chica. Los siguientes son magníficos, pero ninguno como el primero.

Un bar de Valencia: El Biplaza de Ruzafa, un sitio pequeño pero tremendamente divertido donde Paco y Juancho te dan un abrazo nada mas cruzar la puerta.

Una calle de Valencia: No es una calle exactamente, la Plaça del Comte del Real en el barrio de La Seu, no tiene nada especial, pero parece que por ella no haya pasado el tiempo.