Gema Rúperez fue al Heraldo de Aragón y contrató varios anuncios en sus páginas de contactos. Se hizo pasar por prostituta, aunque en realidad es artista. Nació en Zaragoza, donde ahora reside, pero estudió Bellas Artes en Valencia. Los anuncios eran ocho versos de ocho poemas de amor escritos por mujeres como Alejandra Pizarnik, Dulce María Loynaz o Gioconda Belli. El teléfono no paró de sonar y de recibir mensajes.
María Gimeno cogió un cuchillo y un ejemplar de la Historia del Arte de Ernst Gombrich. Lo abrió en canal a machetazos. Y en los huecos creados en sus entrañas añadió nuevos capítulos. Capítulos protagonizados por mujeres artistas. En el libro no aparecía ninguna. Lo hizo copiando la maquetación y la tipografía. El resultado es un libro mucho más apetecible que el original. Y más justo.
A Andrea Hauer le cambió la vida ser madre. La vida cotidiana y la artística. Tuvo que quedarse en casa y adaptar sus creaciones al cuidado de sus hijos. Eso significaba utilizar materiales que no les pudieran dañar. Y formatos que fueran fácilmente transportables. Así se decantó por la costura y por reflejar en sus obras su nueva realidad y las responsabilidades que por ser mujer se supone que, tradicionalmente, debe asumir.
Ellas son las autoras de tres de las diez obras seleccionadas en los Premios de adquisición Mislata 2017 que tenían como tema la igualdad de género. Una iniciativa de la Biennal de Mislata Miquel Navarro convertida en exposición, comisariada por Alba Braza, y que se puede visitar en el Centro Cultural de la localidad valenciana hasta el 31 de enero, solo en horario de tarde.
Missed call es la instalación de Rúperez en la que comparten espacio el móvil utilizado que aún sigue sonando como comprobamos en nuestra visita; un vídeo grabado con cámara oculta en el que se registró el momento en el que pagaba sus anuncios; las páginas de los periódicos donde aparecieron, ennegrecidas salvo el fragmento suyo; y una pantalla que dispara mensajes de algunos (desesperados e inquietantes) clientes.
El nuevo libro creado por Gimeno se muestra junto a una grabación de la performance en la que llevó a cabo su reconstrucción. Y Living, la obra de Hauer, perteneciente a su serie Hogar Dulce Hogar, luce esplendorosa y minuciosa al tiempo que muestra una estampa excesivamente habitual en los hogares.
El resto de artistas seleccionados son Diego Diez, Gabriella Bettini, Rosalía Banet (Primer Premio), Sonia Navarro, Sandra Paula Fernández (Segundo Premio), Manuel Antonio Domínguez Gómez y María Carbonell. Una muestra variopinta en formatos, soportes, técnicas y puntos de vista; que huye de los mensajes fáciles y previsibles; apostando por el compromiso social y la denuncia, pero sin anteponerlo a la (alta) calidad de las propuestas. Una de esas exposiciones que nadie se perdería al visitar otra ciudad y que aquí está a solo unas paradas de metro de València. Imprescindible.