La exposición El Cos Humà, del valenciano Andreu Alfaro (1929-2012), en Galería Cuatro (del 3 de febrero al 18 de marzo) cuenta con cuatro esculturas y veintiún dibujos originales del artista. Estas obras son el resultado del trabajo realizado a partir del dibujo trazado directamente sobre modelos desnudos durante la década de los años ochenta.
Andreu Alfaro fue dibujante por formación y vocación. En esta serie que dedicó al cuerpo humano, expuesta por primera vez en el año 1985 en la Sala Gaspar de Barcelona, sorprendió con una dimensión más íntima, alejada de la estética geométrica y constructivista que le había precedido y más cercana al dibujo al natural como expresión artística. Estos dibujos y esculturas metálicas demuestran un excelente dominio en el desarrollo de los ritmos lineales en el espacio y consiguen un equilibrio perfecto entre naturalismo y abstracción.
La línea ha sido un elemento persistente en toda su obra. Alfaro recurre a la flexión de la línea, mediante contornos esquemáticos y fragmentarios que obligan al espectador a completar las formas, tanto en sus dibujos como en sus esculturas. Convierte la escultura en un dibujo en el espacio, sin perder su carácter tridimensional y depura las formas dejando de lado el detalle para ir dando un mayor protagonismo a la idea que quiere transmitir, alcanzando así la maestría de la sencillez.
También resulta innegable en estas piezas el interés del autor por el desnudo humano dentro de la dimensión erótica de la escultura y el dibujo. Una belleza clásica de formas sensuales a la vez que estilizadas, que muestran el placer por un dibujo libre y espontáneo que Alfaro desarrolló durante esta época en contraposición a la escultura inmaterial de dibujos y siluetas de años atrás.