Foto: Josep Tobella.

Una estética minimalista y delicadamente visual. Un montaje escénico protagonizado por una esfera blanca que se va transformando ante los ojos de los espectadores, adoptando la forma de paisajes y simpáticos animales. Este es el punto de partida de Baby Esferic, la obra con la que la compañía catalana Aboon Teatre lleva recorriendo la península desde su estreno en 2019 y que este domingo 15 de octubre aterriza en la Sala L’Horta.

El centro de Castellar-Oliveral reanuda su programación específica para bebés con una de las compañías pioneras en la producción de espectáculos para este tramo de edad. Según Mei Samarra, una de las creadoras del espectáculo, “esta obra tiene el objetivo de expresar la gratitud que todos, especialmente los bebés, deberíamos sentir por vivir en este maravilloso planeta. Para ello echamos mano de lugares y situaciones que hemos vivido y también de espacios que han sido degradados por el hombre. Todo a través de la poesía visual, sin texto”.

Mei y su compañero Eduardo Telletxea proponen un viaje en el que los bebés, en compañía de sus padres, son testigos del nacimiento de nuestro planeta. Un planeta entendido como un organismo que se rige por un sistema en virtud del cual todos los habitantes producen efectos en el entorno y al mismo tiempo experimentan las consecuencias de los cambios que se producen en el mismo. En este viaje nos acompañarán majestuosas medusas que se sumergen en el fondo del mar, tortugas milenarias que nos instruirán acerca del ciclo de la vida o un muñeco de nieve que vive en el Ártico. Baby Esferic es una obra dirigida a un público de primera infancia, pero que puede atraer a espectadores de todas las edades.

“Esta obra logra captar la atención de público hasta el punto de que se podría escuchar el aleteo de una mosca dentro de la sala. Los bebés reaccionan de forma espontánea ante el espectáculo y las niñas y niños ríen y aplauden. Aunque la frase que nos suelen repetir siempre los padres es que no creían posible que su hija o hijo pudieran estar callados y prestando atención a una sola cosa durante media hora”, concluye Mei.

Esta pieza se representará el domingo 15 de octubre en dos pases: a las 11 y a las 12:30 horas.