Foto: Patricia Koning
Fidel Fernández, Antonio Pagudo, Antonio De La Fuente y Luis Cao son los brokers a los que hace referencia el título del montaje teatral de Yllana. Cuatro actores entregados al principal objetivo de la obra: hacer reír al espectador y conseguir que se olvide de sus problemas durante un buen rato. Problemas que, seguramente si rascáramos un poco, descubriríamos que se los han ocasionado personajes como los que están encima del escenario.
No podía «Brokers» tratar un tema más de actualidad, ¿no?
(Luis Cao) Increíblemente cuando creamos «Brokers» no existía ni la sombra de la locura (estafa) con la que los señores del dinero nos iban a sorprender. Se podría decir que comenzamos a reírnos de la crisis en el mismo momento en la que esta nacía.
Aunque el espectáculo caricaturiza a estos brokers, ¿hay intención de que algún poso crítico quede en el espectador y ya cuando esté en casa reflexione sobre lo que ha visto?
Como todas las comedias de Yllana , «Brokers» pretende la risa casi continuada del espectador , y cualquier reflexión (que las hay) surge siempre entre carcajadas. En «Brokers» está la gran parodia de los megaricos y reírse de ellos resulta catártico.
¿Cómo se consigue esa conexión que establecéis con el público sin decir ni una sola palabra? ¿Qué es lo más dificil de ello?
Nuestro oficio es crear personajes. historias situaciones y gags, sin usar la palabra. Llevamos jugando e investigando en este teatro más de 20 años con muchas comedias de éxito. Y en todas, Yllana consigue la complicidad del público en cuanto aparecen los personajes en escena. La naturaleza universal de las historias y situaciones cómicas que contamos nos acercan al público y la risa es nuestro mejor vehículo. En cuanto a la dificultad, cuanto más difícil es, más nos apasiona!
Foto: Patricia Koning
¿Cómo definirías la obra?
Una comedia visual espectacular!
¿Van a encontrar los espectadores en «Brokers» esa dosis de humor negro e ironía marca de la casa de las producciones Yllana? ¿Y qué más encontrarán?
Encontrarán un show que técnicamente es impecable: la música, la luz, sonido, pantallas de leds y efectos sonoros. Todo al servicio de estos cuatro adictos al poder y al dinero. Todo al servicio de la comedia
¿Qué satisfacción produce hacer reír a la gente en estos tiempos tan duros?
Es cierto que tiene un valor especial recargar de endorfinas a un público al que le cuesta cada día tener motivos para reir. Pero público y actores nos retroalimentamos, su risa nos da sentido y al mismo tiempo coseguirla es nuestro deber como cómicos.
Foto: Patricia Koning
¿Qué importancia tiene la banda sonora en «Brokers»?
Toda! No sólo marca estados de ánimo, exalta, remarca una escena, o la bailamos, sino que también la música en ocasiones es comedia.
La puesta en escena parece ser un personaje más de la obra, trasladando, incluso, el espectáculo más allá de los límites del escenario, ¿no?
Tiene que ver con la complicidad y el juego. Hacemos partícipe al público y el público se mete tanto que quiere jugar. Y ambos disfrutamos como locos durante hora y media de risas.
