rosenvinge

1.- Anda la agenda de festejos descocada. Y eso está bien. Al margen de las actuaciones de Single y Polonio, ya comentadas en estas páginas, hay eventos para todos los gustos. Por ejemplo, Christina Rosenvinge presenta (viernes, 22’00h, La Rambleta) «Lo nuestro», su disco más reciente. Pocas carreras se han construido con capítulos tan absolutamente diferentes. La nueva ola madrileña de Ella y los Neumáticos, la vergüencita ajena de Magia Blanca, el pop desorientado de Alex & Christina, los infravalorados Christina y los Subterráneos y sus introspectivos discos en solitario. El primero de ellos, «Cerrado», posiblemente el mejor de todos los que ha grabado, ya marcaba distancias con su pasado musical. Más íntima y menos dada al protótipo de composición clásica, es el germen de lo que han sido sus álbumes posteriores. Su amistad con Lee Ranaldo (y la posterior con Nacho Vegas) acabó con algunos absurdos prejuicios de esos que abundan, en demasiadas ocasiones, en este mundillo. La revista Rockdelux le colocaba en portada este mes. Cierta introspección también define el trabajo de Júlia, con disco reciente («Nuvolàstic»), una suerte de folk-pop en el que las atmosferas tienen un acertado protagonismo. Júlia forma parte (junto al inclasificable Miquel Serra y una especie de supergrupo catalán que responde como Es Declivi) de La Triangonal, una estimulante iniciativa que aterriza este sábado (22’00h) en la Sala Russafa.

2.- Un día antes, en el mismo lugar, La Gran Esperanza Blanca vestirá  de largo su «Tren fantasma». Recuperados definitivamente para la causa, después de la edición de su disco anterior «Derrota», los valencianos continúan haciendo inmersión en los sonidos de raíz americana. Folk impoluto, rico en melodías, que universaliza una iconografía propia con la misma destreza que, por ejemplo, lo hacía Más Birras. Arropados por una nómina excelsa de colaboradores, la banda apuesta por una mayor presencia eléctrica, sin dejar a un lado algunas de sus señas de identidad (la armónica, la manera de cantar de Cisco Fran, su querencia por los ritmos más trotones, los estribillos punzantes,…), alcanzando la excelencia con esa oda nostálgica titulada «Los años de felicidad». Un disco que en directo debe multiplicarse. No será el único grupo valenciano que se subirá a un escenario este fin de semana. Hoy viernes,  Chlöe’s Clue abrirá la noche de la fiesta de Redacción Atómica (en Wah Wah) cuyo plato fuerte son los estimulantes Ukulele Clan Band. El sábado sigue la locura: Emma Get Wild desgranarán (sábado, 22’30h) su estupendo “Once, I was a tiger” en dELUXE. A la misma hora, Josh Rouse hará lo propio con su reciente «The Embers of Time» en el Wah Wah; y Fernando Garcín & Panta Rei + Xavier Morant estarán en La Edad de Oro.

3.- Por supuesto, hay más oferta musical (Myles Sanko o The Jazz Butcher el viernes en El Loco y 16 Toneladas, respectivamente, sin ir más lejos), pero no sólo de tonadillas vive la humanidad. Isidro Ferrer inaugura exposición, «Naturaleza nómada», hoy mismo, en Set Espai d’Art. Un lujo que se podrá visitar hasta el 12 de junio. También de estreno está la ilustradora Ada Diez (el 50% de Hits With Tits) con la muestra «Somos una imposibilidad en un universo imposible» en la inigualable Sebastian Melmoth (viernes, 19’30h). Como indican en la convocatoria en facebook: «La cultura pop, Japón y lo fantástico se darán cita en esta exposición de originales, siempre aderezado con un puntito gamberro». El sábado por la mañana (12’00h), hay doble opción poético-musical, para que no exista opción al descanso. En la Llibreria Ramon Llull, los protagonistas serán los libros «Cuando tú me leas dentro de mil años», de Miguel Labordeta y «Soundscape», de Carlos Fernández López. Habrá recitado y música de Juan Sebastian Bach y David Alarcón. En la Librería Bartleby, Carolina Otero presentará poemario nuevo, «Balada del rímel corrido». Y, por la tarde (20’30h en Las Naves) Toni Agustí, César Tormo y Juli Disla representarán «El hombre menguante», obra que tendrá un segundo pase el domingo (19’00h) para que nadie se aburra ni un minuto.