1.- El sábado me encontré con un bar cuando iba camino de una librería. Ocurrió en la Plaza de Vannes. Me senté en una de las mesas de la extendida terraza de L’Hostalet y pedí medio bocadillo de tortilla de patatas y una Coca-cola. Una Pepsi, me apuntó el camarero. Llevaba prensa del día como para estar diez noches sin dormir, pero me costaba concentrarme. Pasó entonces un hombre con una especie de muestrario en la mano. Una de esas personas que suelo relacionar con los charlatanes de feria. Iba cantando el estribillo de «La Bamba». Feliz, seguro de sí mismo, sin el ademán falso que llevan regalándonos los candidatos unos cuantos días. Fue algo fugaz. Como el medio bocadillo. Pagué, cargué con la prensa y seguí mi ruta hacia Dadá. 8 años lleva el proyecto de Inma Pérez en pie. Que bien le sienta el nombre en cuestión. Y que necesarias son aventuras así en una ciudad que (casi) siempre ha confundido la modernidad con la modernor. Allí coincidí con Escif (al que no conocía personalmente) y Fani Grande (a la que no había «desdigitalizado» aún). Además de por su oferta, hay muchas razones por las que pasarse.
2.- En L’Hostalet la gente aún hablaba del sofocante calor del último jueves. Una madre, su hija y alguien a quien no conseguí identificar si como hermano o pareja de la segunda. Cada uno contaba cómo había pasado el día. Me los imaginé con camisetas con la leyenda «Yo sobreviví al calor del 14 de mayo del 2015». Yo estuve en La Rambleta. Se presentaba el Festival Pirineos Sur para la prensa valenciana. Una comida que, sólo se ha convocado dos años, pero va camino de convertirse en un pequeño clásico. El certamen se celebra del 17 de julio al 2 de agosto en Lanuza y Sallent de Gállego, poblaciones oscenses cercanas a Francia. Estuvo su director, Luis Calvo, apasionado embajador de la cita que ya lleva veinticuatro ediciones. Este año, entre otros, desfilaran por los escenarios Bombino, Noa, Gepe, Mark Knopfler, Lila Downs o Goran Bregovic and Wedding and Funeral Band. Si se animan a ir, no olviden la manga larga.
3.- Un día antes, tv3 estrenó el programa «Còmics». Una apuesta que costaría ver en otras televisiones. Contaba Mònica Planas en el Ara los trompicones que había tenido que superar su estreno. Como el título indica va sobre esas personas que hacen (o hacían) reír. Eugenio fue el primer protagonista. Más de una hora que se queda corta y eso que la parte de show teatral es totalmente prescindible. También Àngel Llàcer cuando se descoca. Se trata de una de esas producciones que uno jamás imaginaría en la desaparecida Canal 9. Aún recuerdo «Tip & Cía», que pretendía homenajear al gran cómico valenciano con un guión atolondrado y las prisas propias del audiovisual autónomo.