Foto: Todd Selby
Los libros de moda no han sido creados para decorar estanterías o mesas. Los libros de moda son obras de consulta y de referencia. De la misma forma que se acude al María Moliner para recuperar el significado de palabras casi olvidadas; se revisitan las bibliotecas sobre moda, para traer al presente la moda que fue y entender la que será. En los stands de la Feria del Libro de Valencia podéis encontrar sugerentes títulos que giran entorno a la Historia de la Moda y sus protagonistas (ensayos, biografías, gráficos, ilustrados, para fetichistas de alguna prenda o accesorio…)
Os dejo con algunos de mis preferidos o que están en la lista de imprescindibles. Darle al play:
Memorias. Grace Coddington. Editorial Turner (2013).
Hacer editoriales de moda no es juntar a fotógrafo, modelos y un puñado de ropa. Es algo más. Y ese algo más, se ejemplifica, magistralmente, en la mejor editora/estilista del panorama actual: Grace Coddington. The September Issue (2009) la puso en el mapa emocional de Vogue USA. Si la Wintour era la calculadora, fría y comercial; Coddington se mostraba como la creativa, la pasional, el corazón artístico de la publicación sobre moda más influyente del mundo. No hay otra como ella para contar historias con la ropa. Esta autobiografía aunque (conociéndola) no salga nadie mal parado, respira moda de la forma más auténtica y honesta.
Balenciaga. Cristobal Balenciaga Museoa. Editorial Nerea (2011).
Sin paños calientes, Balenciaga es 100% nacional aunque los franceses hayan acabado apropiándose de una marca y Nicolas Ghesquière supiera interpretar a la perfección el estilo futuro del maestro. Si te gusta la moda, tendrías que visitar su soberbio museo en el bello pueblo de pescadores de Getaria, donde nació y aprendió a coser. El resto es historia. Este libro es como nuestro Quijote, universal e imprescindible. Donde Cervantes veía molinos, Balenciaga descubrió nuevas siluetas.
El Espejo de la Moda. Cecil Beaton. Ediciones B.
El Hola de todo lo que se coció en el mundo de la moda en la primera mitad del sXX, contado con el humor punzante de un fotógrafo-ilustrador-diseñador que disparaba su objetivo con la misma naturalidad que se codeaba con la alta sociedad. Fotógrafo oficial de las revistas Vanity Fair y Vogue, no se perdió ni una fiesta y además, le dio tiempo a diseñar el vestuario de películas como Gigi o My Fair Lady. Un «¿quién es quién?» entretenido, mordaz y muy desprejuiciado. Sólo cometió un error antes de morir: desvelar que había tenido una relación con la divina Greta Garbo.
Christian Dior y yo. Christian Dior. Editorial Gustavo Gili (2007).
Supersticioso (consultaba todos sus pasos a las adivinadoras), colérico (sus enfados con las oficialas del taller eran tan frecuentes como sus remordimientos) y gourmet excesivo que nunca consiguió adelgazar (se volvía loco por los dulces, el pollo en salsa, el pastel de carne)… Christian Dior sería hoy carne de sensacionalismo pero la costura fue su terapia (como para muchos otros), y este libro sincero y meridiano retrata el negocio de la moda con todos sus entresijos. Dos datos irrelevantes: no sabía conducir y detestaba la mecánica.
La Mode Parisienne. La Gazette du Bon Ton. 1912-1925. Alain Well. Bibliothèque de L´Image.
Un libro para ser admirado, repleto de ilustraciones de una publicación «La Gazette du Bon Ton» que fue la revista de moda más importante de París (y por tanto del mundo en ese periodo). Solo vio interrumpida su actividad durante la guerra, regalando trece años de editoriales de moda cuando estos se dibujaban. Eduardo García Benito, Lepape, Puget… y muchos más pasaron por sus páginas. La crème de la ilustración al servicio de Worth, Poiret y Paquin, entre otros.
The Sartorialist. Scott Schuman. Penguin Books (2009).
Hay un antes y después en la moda en la red que la marca este fotógrafo urbano, padre (con permiso de Bill Cunningham) del streetstyle. Scott Schuman nos caiga mejor o no, con su blog The Sartorialist, la llamada biblia del estilo callejero, puso delante de su objetivo a todos los transeúntes con estilo de Nueva York. Amante de la sastrería clásica, amplió su alcance fotografiando a mujeres y ganó con el cambio. Hoy su blog, junto al de su chica, Garance Doré son dos referentes en el universo moda (colaboran con marcas, acuden a dar conferencias a las universidades, son premiados por su labor comunicativa…) Tanto es así, que las revistas se dieron cuenta y empezaron a cambiar sus discursos y sus empresas. En constante evolución, tanto Scott como Garance aún no han dicho la última palabra… Y van 4 libros…
Moda. Una historia desde el siglo XVIII al siglo XX. VV.AA Taschen.
No podía faltar un libro de la editorial alemana que tanto se curra las ediciones sobre moda y diseño. Este doble libro, no apto para leerlo en el metro, es lo que se denomina un coffe table book (libro de mesa auxiliar o de café) anglicismo reservado para los libros tochos. Tenerlo es un disfrute (no me refiero a que puedas dejar las tazas sobre él) porque te traslada directamente a una de las mejores colecciones de moda que existen en el mundo, el Instituto de la Indumentaria de Kioto. Las fotografías de excepcional calidad nos permiten ser voyeurs de tres siglos de moda. Para quedarse bien saciado.
** la foto de inicio es de la biblioteca personal de Karl Lagerfeld un apasionado por el libro de moda y de diseño. 200.000 ejemplares no son suficientes para alguien que ha dicho: «los libros son una droga de tapa dura, sin peligro de sobredosis. Yo soy la víctima feliz de los libros”.
