Mascarpone Discos es el sello que regenta Jose Guerrero (Cuello, Jupiter Lion, Rastrejo, Segunda Persona, Chaval) en el que saca discos que le gustan sin importarle el estilo. Una máxima que le ha llevado a conformar un catálogo (a veces en vinilo, a veces en casete) en el que conviven algunas de sus bandas y maravillas como las de Miguel A. Ruiz, Tipex, RRA o La Terre Tremble!!!. Mascarpone Discos cumple 6 años y lo celebra con una fiesta con 4 grupos. Será el sábado, 9 de marzo, en 16 Toneladas, a partir de las 22h. Entradas anticipadas a 8€ escribiendo a discosmascarpone@gmail.com y en taquilla a 12€.
Za! son, posiblemente, los más conocidos del cartel. El año pasado publicaron Pachinko Plex, un disco con el que dejan en ropa interior a cualquier género (post-rock, free jazz, kraut rock, hip hop,…) que se les acerque y en el que la libertad y el disfrute compositivo les hace, por ejemplo, hermanar sonoridades africanas con otras que parecen llegar desde el país del sol naciente. Sus directos siempre son de caballo ganador.
Piloot vienen de Bélgica y se presentan como un viaje entre el ambient astral y el caos extático que te deja arremolinado en paisajes sonoros caleidoscópicos. Y tiene la misma pericia para autodefinirse como para crear atmósferas ondulantes en las que Brian Eno nadaría bien a gusto.
Rastrejo es, como apuntábamos al principio, una de las bandas de Guerrero. En la amplia entrevista que le hicimos hace unos años decía que «siempre ha sido para experimentar con cosas que no suelo utilizar, sintetizadores, teclados o aparatos raros. Formas de hacer las canciones menos canciones». El año pasado editó El Placer, un buen potaje sonoro con electrónica exótica, ritmos sincopados y alpiste para bailar sin manuales.
M.A.F.H., More Acid For Hegel, es una huracanada propuesta en la que las etiquetas saltan por los aires y en la que todo se cuestiona, y a la que términos como improvisación, free jazz-punk, no-wave del averno o chifladura metal-intestinal se le quedan cortos. Los culpables de este explosivo cóctel son Avelino Saavedra a la batería y Antonio Luis Guillén a la guitarra. Su música se disfruta más cuanto menos empeño se pone en esa artifical manía de querer entenderlo todo.