“Coses a fer abans de morir” (Cristina Fernández Pintado y Miguel Llorens).

Seis amigos (Cristina Fernández Pintado, Manuel Maestro, Vanessa Cano, Mireia Pérez, Oriol Tarrasón y Àngel Fígols) deciden cumplir con la promesa que le hicieron a un séptimo (Sergio Caballero) antes de fallecer. Para ello pasarán un fin de semana juntos en el que llevarán a cabo algo que deseen hacer antes de morir. Ese es el punto de arranque del film Coses a fer abans de morir, ópera prima de Cristina Fernández Pintado y Miguel Llorens. Estrenada en la Mostra del año pasado, consiguió cuatro Premios del Audiovisual Valenciano (mejor actor, mejor actor de reparto, mejor actriz de reparto y mejor música) y ahora llega a Filmin. Hablamos con ambos cineastas de su debut.

¿Cómo surge la idea de la película?

Cristina: La idea de escribir esta historia surgió hace muchos años. La amistad, pero sobre todo las relaciones humanas, es algo que siempre me ha interesado muchísimo. Yo pertenezco a una generación que aún lleva sobre sus hombros, mal que nos pese, las imposiciones de una manera de vivir en la que no creen y que además está obsoleta y es inviable: un trabajo estable, una pareja estable, una vida… estable al fin y al cabo. Todo esto ha provocado una lucha interna y en ocasiones agotadora contra la frustración, contra el concepto, para mi dañino de lo que nos han enseñado que es la madurez, una lucha en la búsqueda de lo que somos, de quienes somos y sobre todo de lo que queremos ,y creo que un gran refugio ha sido las relaciones de amistad, esos núcleos que se han convertido en familia, en pareja, en aliados, en maestros, pero sobre todo núcleos donde nos hemos sentido entendidos y acompañados, con sus enfrentamientos, con sus distancias y sus reencuentros. También la pérdida, que entró en mi vida desde muy joven, me hizo ver que la vida está para vivirla, experimentarla, sin perdernos en el ruido agotador de los cánones, de los juicios, a veces es todo mucho más sencillo y es una pena que nos demos cuenta cuando vemos que se nos acaba, porque ya es tarde.

Así que a partir de toda esta observación de lo que me rodeaba y de lo que de alguna manera había vivido, vivía y sabía que me quedaba por vivir, me surgió la enorme necesidad de contarlo, de crear esta historia ficticia pero a la vez tan real, tan mía y tan de tantas… y tras varios intentos de sacarla adelante, entre ellos un teaser, en el que se involucraron muchas personas a las que les estaré siempre agradecida, llegó The Fly Hunter y con ellos se hizo realidad.

Miguel: «Coses…» es un proyecto que Cristina escribió hace más de diez años e intentó levantar varias veces, pero sin acabar de conseguirlo. Yo participé en el teaser que se rodó para buscar financiación como director de fotografía y, a partir de ese momento, de alguna manera, conecté con el espíritu de la peli y desde la productora The Fly Hunter, de la que soy socio junto a Lorena Torres, decidimos que «Coses…» era un excelente proyecto y nos lanzamos.

¿Por qué la opción de dirigirla a cuatro manos? ¿Cómo os repartisteis las labores de dirección? 

Miguel: Hacer una película es un poco un acto de fe. Tú puedes saber hacia dónde quieres ir, pero las circunstancias pueden ser muy variables y llevarte hacia otro lugar. Dirigir la peli entre los dos no fue algo premeditado, fue surgiendo durante los dos años de preparación y financiación previos. Cristina ha sido enormemente generosa y me permitió sumergirme en su universo y aportar mi visión, mi tempo, a la historia. Entre los dos fuimos revisando su guion y fuimos construyendo la película que íbamos a rodar. Cristina tenía muy claro el espíritu y carácter de cada uno de los personajes, yo los asumí, ensayamos y solo quedaba rodar. Como ella interpretaba también a uno de los personajes, montábamos las escenas juntos y yo me encargaba de rodarlas. Creo que hemos viajado juntos prácticamente sin divergencias. Para mí ha sido fantástico.

Cristina: Efectivamente, como bien dice Miguel, no fue algo premeditado, se fue dando y creo que fue lo mejor que le pudo pasar a esta historia. Por mi parte admiro profundamente a Miguel como profesional y como persona y sabía que los dos íbamos a conseguir un intercambio y una conjunción fantástica. Él tenía una experiencia y unos conocimientos en el medio de los que yo carecía y de los que he aprendido mucho y espero seguir aprendiendo y yo tenía un universo ya metido en vena. Así que entre los dos fuimos modulando la historia, encontrando el equilibrio entre sus tempos y los míos, entre mi visión y la suya y creando una visón conjunta mucho más rica, con más aristas, con más contrastes… conseguimos entender cada secuencia juntos, Miguel fue absolutamente respetuoso con mi visión de los personajes, y así las creamos y las ensayamos. Por lo tanto pudimos comenzar con todo muy claro y por supuesto abiertos a descubrir. ¡Repetiría con los ojos cerrados! Ha sido una experiencia maravillosa y enriquecedora a todos los niveles.

Una parte importante de la película recae sobre los intérpretes ¿Cómo llevasteis a cabo el casting? ¿Escribisteis el guion teniendo en mente (o ya sabiendo) quién iba a dar vida a los personajes?

Cristina: La mayoría de los personajes estaban escritos para los actores que los interpretaron, lo tenía clarísimo, no solo eran amigos sino grandes profesionales en los que creía y creo y que admiraba y admiro profundamente. Actrices y actores que sabía que iban a sostener y hacer crecer cada personaje y tuve la gran suerte de que The Fly Hunter, tanto Miguel como Lorena, lo respetaran y además lo apoyaran. Ellas y Ellos son la historia y hacen un trabajo maravilloso, todo generosidad, talento, profesionalidad y sobre todo verdad, una verdad que atraviesa el concepto de “nombre” que nos intentan imponer para que un proyecto salga adelante y tenga recorrido. Ellas y ellos tienen nombres, nombres en mayúsculas y creo que sus trabajos en esta película son una gran muestra de ello.

Miguel: El casting era una pieza fundamental de la película. Cristina tenía claro quién debía interpretar a cada personaje y desde The Fly Hunter se respetó esa idea. Es algo de lo que estamos enormemente contentos y también orgullosos porque hemos podido demostrar que hay un talento extraordinario en una parte del universo actoral local, quizá solo faltan la propuesta o la audacia para poder transgredir los convencionalismos del mercado y hacerlo evidente.

“Coses a fer abans de morir” (Cristina Fernández Pintado y Miguel Llorens).

¿Tuvisteis algunas películas en mente a la hora de escribirla y rodarla? 

Miguel: Cada uno de nosotros somos consecuencia de todo aquello que leemos, vemos, oímos y experimentamos. Estamos influenciados por toda nuestra cultura y es de necios no reconocerlo. Pero al mismo tiempo hay que dejarse llevar desde ese aprendizaje previo e ir desarrollando una manera de mirar, de ver el mundo. Puedo decirte que a la hora de rodar tuvimos toda nuestra experiencia presente y que intentamos crear una experiencia sensorial que sostuviera al espectador durante los cien minutos de la peli sin darle tregua.

Cristina: Estamos llenos de influencias obviamente y esto enriquece nuestro universo y nuestras maneras de crear y concebir las historias, pero nunca revisionamos ningún título en concreto para el proyecto, dejamos que todo fluyera y fuimos encontrando nuestra manera, que seguro tendrá aromas de todo aquello que nos ha marcado sea audiovisual, literario, teatral… o simplemente de experiencias de vida.

El personaje de Sergio Caballero dice en la película: «El mundo está lleno de cosas que me voy a perder. Me las voy a perder y todo seguirá igual sin mí”. ¿Creéis que ahí se encuentra la esencia de la misma?

Miguel y Cristina: Bueno, esa es una de las tesis de la película, una forma de decir que en realidad somos bien poco y que solo existimos desde el reconocimiento y el recuerdo del otro, pero sobre todo desde nuestra propia experiencia. Pero la película también habla de la lealtad, de la amistad y de cierto sacrificio y entrega que, en realidad, nos reconcilia con nosotros mismos. Hablamos de ese compromiso que debe haber para construirse uno mismo para así poder compartirse con el otro.

La película se estrenó en la Mostra, ganó cuatro Premios del Audiovisual Valenciano, ahora llega a Filmin… Teniendo en cuenta las circunstancias especiales que llevamos viviendo ya un año por la pandemia, ¿contentos con el recorrido? 

Miguel: Esta peli es un milagro meticulosamente prefabricado. Realizado conscientemente hasta sus últimas consecuencias. Sin embargo, hay una parte de todo este proceso que, como autores, no podemos gobernar totalmente, y es el mercado. Con todo, «Coses a fer abans de morir» ha sido adquirida por Á Punt y por TV3, está siendo exhibida en festivales con una excelente acogida y ha recibido varios premios y continúa su periplo por otros certámenes. La manera en la que vemos el cine ha cambiado radicalmente y no sabemos muy bien cómo será la exhibición tradicional en el futuro, no sabemos qué salas resistirán y qué modelo de cine se verá. Lo que sí sabemos es que la exhibición a través de plataformas u online es un camino ineludible y supone una ventana para todo aquello que “no cabe” en los estándares de la distribución tradicional.

Creo que modelos de exhibición como Filmin son una oportunidad para disfrutar de todo aquel cine que ahora no encuentra salas y ofrece a los espectadores una experiencia muy generosa en títulos y en contenidos comprometidos con la cultura, la diversidad y el entretenimiento. Por todo esto, claro que estamos contentos, mucho, y por eso nos gustaría que mucha gente disfrutara ahora, desde sus casas, de la película.

Cristina: Yo no controlo tanto el medio, soy nueva en todos estos aspectos del mundo audiovisual como directora, pero por lo que conozco y sabiendo que nuestra apuesta a nivel de cartel, empezando por mí como directora y guionista, era arriesgada a nivel de mercado creo que la película está teniendo un buen recorrido y muy buena acogida y reconocimiento.

Es verdad que nos ha tocado una pandemia, qué le vamos a hacer, nos ha tocado a nosotros y a todo el mundo así que nos hemos ido adaptando. Desde luego, creamos las historias para poder ser contadas y para que ese acto se complete necesitamos del espectador. Nuestro deseo es que la película pueda disfrutarse y creo que Filmin es una gran opción de exhibición.