Roni es un joven pintor que quiere triunfar como artista. Roni, también, es el título de la nueva ficción creada por Juanjo Sáez (Arròs Covat, Heavies Tendres) y que se estrena en Cinema Jove dentro de su Sección Oficial de Series el próximo domingo 25 de junio.
Como no podía ser de otra forma llevando la firma de Sáez, Roni es una divertida crítica vitriólica de todo lo que envuelve al mundo del arte, ironía afilada hacia comportamientos y personas con nombres y apellidos, en diez capítulos de veintidós minutos, con la presencia (mayor o menor) de Jaume Plensa, Monet o Amy Winehouse, entre muchísimos otros.
Joan Tomàs es el director de la serie y quien contesta nuestras preguntas, con la intervención en dos de ellas del propio Juanjo Sáez.
¿Cuál es tu primer recuerdo de algo que te hizo reír?
Joan Tomàs: Creo que fue mi abuelo, Amor Tomás, poniendo caras cuando yo era niño.
Y ahora, ¿qué cosas te hacen gracia?
Joan Tomàs: Por desgracia, últimamente me estoy riendo mucho con los reels de Instagram. Hace poco que tengo Instagram y me he enganchado. Hay ahí un nuevo humor muy raro que, como digo, me hace mucha gracia, aunque tiene algo extraño.
Si hablamos de humor en España, ¿de quién te encuentras más cercano?
Joan Tomàs: De los chanantes, Raúl Cimas, Joaquín Reyes y toda esta gente. Para mí rompieron el humor en España, un poco como los Monty Python en Inglaterra. Me sentí muy identificado y su humor me encanta, aunque no tiene nada que ver con el mío. Bueno, sí, se puede decir que yo sería como una versión catalana.
Y luego, también, comparto humor con Juanjo Sáez, creador de la serie. Por eso nos ha salido tan bien, compartimos un sentido del humor y una forma de entender los guiones y las series muy parecida.
¿Y a nivel internacional?
Joan Tomàs: Hay muchos que me gustan, pero últimamente con el que más me río es con Sacha Baron Cohen, al que estoy redescubriendo con Bruno, Borat, Who is America?... me apasiona lo que hace y como critica la sociedad americana a través de la comedia. Y me encanta el humor de Will Ferrell, tiene algo que me vuelve loco. El humor tonto americano, no sé por qué, me apasiona.
¿Crees que la comedia está, en todos los sentidos, infravalorada?
Joan Tomàs: A nivel personal para nada, la comedia es la mejor manera, y la más interesante, de transmitir una historia. Pero sí que es verdad que a nivel de premios, y a nivel general, siempre se ha estado infravalorada.
Roni es una serie de humor irreverente sobre el mundo del arte, con mucha ironía. ¿Cómo nació la idea?
Juanjo Sáez: La verdad es que no me acuerdo exactamente cómo nació la idea. Siempre me ha interesado mucho el mundo del arte y siempre me ha parecido que es un mundo más cómico que el del rock and roll. Es un mundo plagado de anécdotas y de personajes extraños, excéntricos y divertidos. Me parece un escenario muy bueno para hacer comedia y, que por otra parte, no se había hecho. Siempre se cae en el tópico de las anécdotas del rockero que tira la televisión por la ventana del hotel y los artistas superan eso con creces y de una forma muy exagerada. Y, además, es un universo muy divertido, la gente no lo conoce. Es muy amplio, con muchos personajes… y me pareció una buena idea desarrollar algo en torno a ese mundo
¿Cómo trabajasteis la parte divulgativa que tiene los capítulos para que no se produjera una ruptura y despistaran al público de la historia y para no caer precisamente en lo que de alguna manera crítica la serie sobre el mundo del arte?
Juanjo Sáez: Hacía falta hacer como pies de páginas, introduciendo algunos personajes que nosotros los podemos conocer muy bien, pero el espectador no. Intentamos que fuera más didáctico pero entre el humor y la ironía, está lleno de chistes. Es que además las biografías de los artistas son muy divertidas. La verdad es que no hay tanta ficción como pueda parecer. Simplemente, tuvimos que destacar cuatro cositas para que la gente se riera y después coger una buena voz que lo doblara, que fuera cómica, que tuviera gracia en sí misma. Es tan fácil como pensar en Santiago Calatrava o Jaume Plensa, son personajes que en sí son muy divertidos. Uno hace puentes en los que la gente se cae y el otro cabezas gigantes, es que… no hay que inventar tanto. Simplemente había que mostrar ese mundo con ironía.
Joan, diriges, eres uno de los guionistas y también de los dobladores. ¿Cómo fue cada uno de esos trabajos?
Joan Tomàs: Empecé como guionista en la serie. Eran unos guiones con mucha tralla, mucho chiste, mucho ritmo. Cuando me propusieron ser director me planteé, porque como director le doy mucha importancia al tempo y al ritmo, que fuese una serie que no parara. La dirigí teniendo en cuenta el no dar tregua al espectador, que fuese muy dinámica. De hecho, incluso, nos hemos pasado de rápidos, pero siempre digo que es mejor eso que aburrir a la gente.
Lo del doblaje es curioso. Como director me encargué de los animatics, que es el proceso anterior a la animación, y le puse la voz a todos los personajes. marcando el ritmo, los gags… Cuando Juanjo lo oyó me dijo que lo sentía mucho, pero que iba a ser yo quien iba a tener que poner la mayoría de voces. Se quedaron muchas voces mías, que luego doblé, como la de Roni, la de su amigo o algunos artistas, y luego ya se completó con actores bastante conocidos en Catalunya que hacen cosas en Tv3 como Polònia o Joel Diaz e hicieron el resto de voces.