Como en todo, en la muerte, también hay categorías. Se muere Pierre Étaix y tardamos una semana en enterarnos. Se muere el PSOE y casi escuchamos hasta su último balbuceo. Es la agenda informativa, nos dirá algún resabidillo. Nos dicen que nunca hemos estado tan informados como ahora. Nos dicen que ahora, tú mismo, te puedes crear tu red de periodistas, siguiéndoles en sus redes sociales, para estar al tanto de la actualidad. Nos dicen que nunca ha habido tantas opciones para estar informados como ahora. Nos dicen que ahora puedes estar informado desde cualquier lugar. Nos dicen que internet ha democratizado el acceso a la información. La sensación es que la mayoría de la gente traga lo que lee, ve o escucha, pero no hace la digestión. Bru Rovira le dice a Ramón Lobo en Tinta Libre: «El problema es que la verdad ya no influye en la gente. Las personas están metidas en un mundo de opinión, no en uno de información». Contaba Quim Monzó, en La Vanguardia, que los taxistas de Pamplona han propuesto que se multe con 60€ a todo aquel que vomite en su vehículo. No estaría mal que la tasa se extendiera a algunos medios de comunicación. Y, ya de paso, por aquello de la agenda informativa, a los socialistas que van a hacerlo en la tradición de su partido.