La Mostra de València-Cinema del Mediterrani, que celebra su 36 edición del 15 al 24 de octubre del 2021, empieza a revelar su programación. Una de las múltiples miradas del festival se detendrá en el fantástico árabe. Un género muy poco representado a lo largo de la historia del cine de la región. Además de proponer una amplia selección de cine mediterráneo contemporáneo, protagonista de la Sección Oficial e Informativa, Mostra de València pretende visibilizar el cine de género procedente de los países de la ribera sur del Mediterráneo. El ciclo “Espectros árabes” está integrado por cinco títulos, cuatro de ellos inéditos en España, y permitirá conocer producciones de Egipto, Marruecos o Túnez.
Una de las razones de la escasa producción de género en la zona es el conflicto que supone aproximarse a temáticas sobrenaturales eludiendo la censura que muchos países establecen cuando los argumentos de las películas tratan de cruzar líneas rojas en cuestiones sociales o religiosas, por no hablar de las restricciones en lo que se refiere a la exhibición de cuerpos desnudos o el abordaje de temas eróticos. Tampoco conviene olvidar las dificultades de financiación y las exigencias tecnológicas en efectos digitales que exigen las producciones de corte fantástico.
A pesar de todo, en Egipto existen ejemplos de cine de terror desde épocas bien tempranas, pero en los últimos años otros países han comenzado a cultivar un género que ya habla en árabe y tiene el futuro garantizado.
“El cine fantástico no ha tenido la oportunidad de desarrollarse en muchos países de la región hasta hace apenas unos años, pero recientemente han surgido títulos muy interesantes que, en ocasiones, recurren a elementos sobrenaturales para plantear importantes reflexiones sobre la identidad y la situación política y social de cada país”, subraya Eduardo Guillot, director artístico del festival.
La selección de títulos incluye Kandisha, de Jérôme Cohen-Olivar, inspirada en la figura mitológica marroquí de Aicha Qandicha. Está protagonizada por una abogada criminal acepta el caso de una mujer acusada de matar a su marido, pero alega que fue asesinado por un espíritu vengativo. Una reflexión en torno a la violencia de género con un reparto que incluye a Amira Casar (Call Me By Your Name) y David Carradine (Kill Bill).
The Blue Elephant (2014), de Marwan Hamed, es un thriller de terror psicológico que no solo situó al mundo árabe a nivel internacional en el terreno de los efectos especiales, sino que además se convirtió en un enorme éxito, ostentando durante meses el récord de ser la película más taquillera de la historia del cine egipcio.
Basada en la novela homónima de Ahmed Mourad, la película incorporaba alucinaciones psicodélicas y posesiones diabólicas que sedujeron al público hasta el punto de generar una espectacular secuela The Blue Elephant 2. Dark Whispers (2019), que supera con creces a su predecesora y no tiene nada que envidiar a las producciones de Hollywood.
Por su parte, Warda (2014), de Hadi El Bagoury, es el primer film egipcio del subgénero found footage. Está protagonizada por un bloguero que regresa a su ciudad natal para investigar y documentar una serie de sucesos paranormales que han estado amenazando a su familia desde la muerte de su padre.
Completa el ciclo Dachra, el primer film de terror en la historia del cine tunecino, dirigido por el debutante Abdelhamid Bouchnak y presentado a nivel mundial en el prestigioso Festival de Venecia. Se trata de una historia ambientada en una aldea habitada por caníbales que propone una parábola social en torno a la sistemática desaparición de niños que azota al país magrebí.
El renacimiento del género en el mundo árabe en las últimas décadas ha favorecido la internacionalización de sus cineastas y la diversificación de sus propuestas. Hablar de cine fantástico árabe significa descubrir una cinematografía que está muy vinculada a las leyendas y a la mitología. No hay que olvidar que la cultura árabe es pródiga en cuentos escalofriantes, criaturas míticas y bestias que han servido de inspiración no solo para muchos cineastas de la región, sino también para el cine comercial estadounidense.
Jurado de la Sección Oficial
La francesa Myriam Mézières será la presidenta del jurado de la 36 edición de Mostra de València-Cinema del Mediterrani. Le acompañarán Tarek Ben Chaabane, Najwa Najjar, Marina Perales Marhuenda y Jean-Michel Bernard.
Myriam Mézières, que debutó en el cine a los 16 años y ha rodado con directores como Claude Lelouch, Jean-Pierre Mocky, Andrej Zulawski, Manuel Gómez Pereira, Cesc Gay o Fernando Arrabal, presidirá el jurado internacional que otorgará la Palmera de Oro a la mejor película y el resto de premios oficiales de la Sección Oficial.
Mézières mantuvo una larga relación profesional con Alain Tanner a lo largo de cinco películas, entre ellas “Una llama en mi corazón” (1987), “El diario de Lady M” (1993) y “Flores de sangre” (2002), que firmó como codirectora. Además, es autora del libro “El sol tiene una cita con la luna” (2018). Coincidiendo con su presencia en la Mostra, asistirá a una proyección especial de “Flores de sangre”, que cumple 20 años y se rodó parcialmente en la localidad de l’Alcúdia. También presentará en primicia “Tinta”, su último cortometraje como directora.
La directora y guionista palestina Najwa Najjar, miembro de la Academia de Hollywood, debutó en el largometraje con “Pomegranates and Myrrh” (2009), premiada en San Sebastián, a la que seguiría “Eyes of a Thief” (2014), escogida como candidata palestina a los Oscar. Su tercera película, “Between Heaven and Earth” (2019), ganó el premio al mejor guion en El Cairo y fue seleccionada para los European Film Academy Awards 2020.
La productora independiente nacida en Cox Marina Perales Marhuenda ha desarrollado una larga trayectoria internacional, que culminó con la creación de La Fabrica Nocturna Cinéma en París, con la que ha producido películas de Ruben Östlund, Jessica Hausner, Chema García Ibarra o Michelangelo Frammartino, seleccionadas y premiadas en los festivales de Cannes, Berlín, Locarno o Rotterdam, entre otros.
El jurado se completa con los ya anunciados Tarek Ben Chaabane, director de la Filmoteca de Túnez y autor de libro «El cine tunecino de ayer y de hoy», que ha sido traducido al castellano y el valenciano este año por Mostra de València, en coedición con el IVC. Y con el compositor francés Jean-Michel Bernard, autor de bandas sonoras para películas como “La ciencia del sueño” o “Rebobine, por favor”, ambas de Michel Gondry.