La formación Bramant Teatre vuelve a Sala Russafa dentro de la décima edición del Cicle de Companyies Valencianes del Centre Cultural i Docent d’Arts Escèniques. Y lo hace para presentar una nueva versión de su último espectáculo, Diosas. Estrenada en enero, la pieza tenía un componente interactivo con el público, que subía al escenario para disfrutar, como un invitado más, de una peculiar fiesta de cumpleaños.
Adaptándose al nuevo contexto, se han modificado ciertos pasajes de la obra y su puesta en escena para seguir emocionando, divirtiendo y llamar a la reflexión, pero sin interactuar con los espectadores, manteniendo siempre las distancias. Un cambio en línea con el protocolo de seguridad que Sala Russafa aplica a todas las funciones que tienen lugar en su teatro, donde es obligatorio el uso de mascarilla, se higienizan los espacios comunes y el patio de butacas antes de cada representación, y siempre se mantiene las distancias entre el público asistente.
Diosas nace del impulso de Jerónimo Cornelles, su creador y director, por rendir homenaje a su progenitora. “No quería perder la oportunidad de hacer algo con ella, así que lo comenté con mis socias en la compañía, María Minaya y Teresa Crespo. Poco a poco fue surgiendo la idea de incorporar a nuestros familiares al elenco y se sumaron al proyecto la hija de María, la hermana de Teresa y mi madre”, recuerda Cornelles para quien uno de los elementos más potentes de esta pieza es la convivencia sobre el escenario de intérpretes profesionales y no profesionales. “Las historias que se cuentan son reales, son experiencias propias del elenco que yo he trabajado para transformarlas en una obra de teatro, pero que están llenas de la verdad a la que cada día se enfrentan las mujeres. Por eso resulta tan emocionante, porque son precisamente quienes las vivieron en su momento las que ahora las llevan al escenario”, explica el dramaturgo.
Desde la apuesta por el teatro contemporáneo y con una clara intención, los temas tratados en el espectáculo y la forma de hacerlo remueven los clichés y conceptos acerca de la feminidad. “Se habla sobre todo de la maternidad, de la experiencia de ser madre o hija, de la decisión de no tener descendencia, de la experiencia del aborto… pero también de las relaciones familiares, con ese amor y entrega incondicional que durante mucho tiempo han asumido las mujeres”, comenta Cornelles, quien se siente tan autorizado como cualquier fémina para firmar esta pieza en la que la generosidad de sus intérpretes ha servido para recoger el testimonio de las diosas anónimas, las heroínas del día a día, a las que esta pieza de Bramant Teatre quiere rendir tributo.
Maria Minaya, Aitana Crespo, Rosa Cornelles, Amparo Ferrer Báguena, Teresa y Carmen Crespo, María Poquet y Ruth Lezcano junto a la activista y drag queen Liz Dust dan vida a este espectáculo, con funciones en Sala Russafa del jueves 26 al domingo 29, incluido el doble pase a las 18 y 20:30 h el fin de semana. Una propuesta donde realidad y ficción se complementan para tratar de mostrar una visión más amplia, realista y respetuosa de la mujer contemporánea.