Spain. Zamora. Sarracin de Aliste, 1990. © Cristina Garcia Rodero / Magnum Photos / Contacto.

Hay una fotografía de Eve Arnold (Filadelfia, Estados Unidos, 1912 – Londres, Inglaterra, 2012) en la que vemos a Marlene Dietrich de espaldas, sentada, brazo izquierdo apoyado en la rodilla sujetando la cabeza. Está en los estudios de grabación de Columbia Records de Nueva York. Han pasado casi setenta años, pero se puede escuchar su respiración.

Hay una serie de fotografías de Inge Morath (Austria, 1923- Estados Unidos, 2002) en las que Saul Steinberg aparece parapetado (compartiendo encuadre con familia o amigos) tras unas máscaras hechas por él mismo sobre unas bolsas de papel. Son de una modernidad apabullante, ha pasado más de medio siglo, pero se pueden escuchar sus carcajadas.

Hay una fotografía de Cristina García Rodero (Puertollano, Ciudad Real, 1949) en la que varias mujeres de negro caminan a modo de procesión por una calle de la localidad italiana de Canosa di Puglia. El duelo les alcanza a la cabeza, donde un pañuelo les cubre toda la cara, siendo como espectros andantes. Está fechada a principios de este siglo, pero se pueden escuchar sus sollozos de dolor impostado.

Podríamos seguir así con cada una de las sesenta instantáneas de la exposición Tres mujeres Magnum: Eve Arnold, Inge Morath y Cristina García Rodero (MuVIM, hasta el 30 de abril). Todas exceden lo retratado, son joyas periodísticas, y aunque capturan un momento atrapado en el tiempo se mantienen muy vivas. Perdura su vigencia informativa e implican en su contemplación a todos los sentidos. Son sublimes.

Arnold, Morath y García Rodero comparten su pertenencia a la Agencia Magnum Photos. Son tres de las escasas siete mujeres que en setenta y cinco años de existencia ha incorporado la empresa periodística. La española es, además, la única representante del país. «Para ellas hablar del papel de la mujer en la sociedad, mirar a sus iguales como en un espejo, ver sus vidas como parte de la suyas propias, fue un acto esencial en el desarrollo de su trabajo», explica Rosa Olivares, comisaria de la muestra.

ESTADOS UNIDOS. Virginia. Petersburg. Huelga civil, grupo central. Formación de activistas para no reaccionar a las provocaciones. 1960. © Eve Arnold / Magnum Photos / Contacto.

Rostros populares (Marilyn Monroe, Yves Saint Laurent, Arthur Miller, Malcolm X…) y otros anónimos acaparan con la misma intensidad e interés el protagonismo de las fotografías. Aquí importa menos quienes aparecen que lo que se cuenta. Incluso cuando se acercan a personajes famosos (Margaret Thatcher, Marlene Dietrich, Ingrid Bergman, Paul Newman…), las imágenes rechazan reflejar el glamour o poder vacuo y optan por las orillas narrativas. Periodismo en estado puro, de ese que se echa falta hoy en día más de lo que se debería.

La exposición tiene algo de infinito. O mucho. Por su contenido, por las distintas lecturas que se pueden hacer de la muestra, por lo que tiene de Historia del siglo pasado y de algo del XXI, por las relaciones que cada cual teja entre las tres fotógrafas y sus trabajos, por las propias autoras (por ejemplo, la vida de Morath es de las que se deberían contar en varias entregas para hacer justicia con todo lo que vivió), por los instantes de periodismo que regala, por la belleza que despreden las imágenes (incluso las más duras). Visitarla una vez por semana seguro que es beneficiosa para la salud, pero, ¡ojo!, que se acaba con el mes de abril.