IMG_0939

Foto: Eva M. Rosúa.

El panorama de los ensayos españoles sobre moda es tan árido como el Kalahari, por eso me extraña que no se atienda más (mucho más) a voces desprejuiciadas y cargadas de conocimiento sobre el tema, como la de Margarita Rivière (Barcelona, 1944).

No es una outsider, quiso ser diseñadora de modas y su padre publicista, la envió a París a hacer prácticas a una empresa donde practicó el iniciático arte del dibujo de figurines, allí además tuvo oportunidad de inaugurar la primera corresponsalía de Marie Claire cuando la revista aun no contaba con edición española, para pasar más tarde a incorporarse a su plantilla ya en España. Desde la superficie hasta la profundidad, porque su conocimiento exhaustivo del siglo XX, le ha permitido generar una de las más extensas producciones con las que contamos sobre el tema moda; un asunto aún estigmatizado en nuestro país, para que se pueda reflexionar sobre él, sin ningún tipo de etiquetas o desdén. Entre sus obras destaca la trilogía: «Lo cursi y el poder de la moda» (Premio Espasa 1992), «La década de la decencia» (Anagrama, 1995), y «Crónicas virtuales» (Anagrama, 1998); pero hay muchos más artículos, monográficos, ensayos entorno al tema que le apasiona: «Historia de la media» (1984),  «La moda: ¿comunicación o incomunicación?» (1977) y más recientemente publicado,  un compendio de sus artículos en formato e-book, titulado “Historia Informal de la moda”.

Siempre me ha parecido inconmesurable la tarea de ponerse a escribir un diccionario. Un esfuerzo de organización, síntesis, y concentración del universo de las palabras en un espacio finito. Y han sido dos mujeres, María Moliner y Margarita Rivière las artífices de los dos diccionarios que más me han interesado. No desdeñes la biografía de aquel que escribe un diccionario podría decirse, porque de entrada no es una ocupación de gente normal, ¿quién en su sano juicio se dedicaría a recopilar palabras, términos, usos y costumbres para su posterior consulta, en un ejercicio de aislamiento, en el que mundo exterior quedara aparcado? Aún siendo comparativamente más pequeño que la titánica obra de Moliner, el «Diccionario de la Moda. Los estilos del siglo XX.» de Margarita Rivière es un manual de uso urgente que revive en una edición felizmente actualizada. Sin duda, aquellos largos años (de 1956 al 2000) que pasó a cargo de los términos sobre moda en la, muy presente para muchos, enciclopedia Espasa (una casa sin Espasa, no era casa), podrían haber sido el interruptor de la idea del diccionario, pero la periodista prefiere apuntar como el origen de todo, a su extensa colección en papel de revistas de moda del siglo XX, desde Vogue a Marie Claire (que pudo completar con la donación de sus tías y demás familia).

¿Y cómo extraer de las revistas la esencia de un siglo de moda, para representarlo con sus personajes, estilos, términos… , sin quedarse corto, o exagerar, o lo que es peor, perderse por las ramas? No hace mucho, escuchábamos afirmar a la periodista en el documental emitido por La2 (la única cadena amiga de verdad de la moda, cuando se acuerda de ella) a propósito de Pertegaz («Manuel Pertegaz, el hombre que vistió a los cisnes», 2014)  que el modisto supo despojar de la moda lo superfluo; un tránsito parecido debió de recorrer ella, para desgranar un abigarrado universo de 100 años de publicaciones (nacionales y extranjeras), y aislar los acontecimientos singulares en el último siglo de las grandes creaciones. Muchos son los que afirman que a partir del XX, todo será y es, reinterpretación.

IMG_0941

Foto: Eva M. Rosúa.

La otra clave para escribirlo es la objetividad, o al menos la neutralidad porque en moda todo es pasión. Otros diccionarios se escribieron fuera de nuestras fronteras pero para la periodista adolecieron de quien señala su moda patria como el epicentro de todo el universo, ocurrió en Francia y también en América. Con un diccionario escrito en España no existía dicho problema, porque lamentablemente siempre en cuestión de moda hemos mirado hacia afuera. Así que el espectro de chovinismo queda de entrada eliminado.

Desde la T de unas transparencias iniciadas en 1968 por la osadía de Yves Saint Laurent,  hacia la G del dibujante Gruau, René (1909-2004) que renovó la ilustración de moda, pasando por la H de hortera, los términos que significaron algo tienen cabida en este manejable diccionario que ¡sorpresa! viene ilustrado en los márgenes por el diseñador Antonio Miró.

¿Y quién recopilará la moda del siglo XXI? Margarita Rivière no está por la labor de iniciarla cuando lo que más le apetece es ir despacio, y no vivimos precisamente en la era de la lentitud, y menos si de moda hablamos. Lo seguro es que esta vez, no bastará con la revisión del papel. Ya puede ir apuntando a quien le corresponda, porque en lo que llevamos de siglo, sólo el juego de las sillas de las grandes casas de moda daría para uno de los tomos de la espasa.

«Diccionario de la Moda. Los Estilos del Siglo XX». Margarita Rivière. Debolsillo