Ya han pasado cuatro años desde el último disco con canciones propias de Manolo Tarancón (aunque en 2017 publicó Asuntos pendientes, compuesto a partir de poemas del gallego Juan Carballo). Aquel Historias mínimas debería haber sido un punto de inflexión en su carrera (volvía en solitario después de su aventura en Reno; contaba con las colaboraciones de Xoel López, Fabián y Mikel Erentxun; pero sobre todo contenía una estupenda colección de inspiradísimas canciones). Pero no ocurrió y provocó que Tarancón decidiera hacer un parón musical, sin tocar y sin sacar discos. Desde entonces se prodiga poco en los escenarios, aunque extraño sería que no hubiera seguido componiendo estos años. Mientras esperamos noticias suyas, le preguntamos por sus favoritos:
Una canción:
Love The One You’re With, de Stephen Stills.
Podría quedarme con casi todas las compuestas por Stephen Stills, pero este tema creo que es el que mejor resume su manera de componer, la mezcla y dominio de diferentes estilos, el uso de la instrumentación, las voces y la combinación de lo acústico y eléctrico. Una canción que puedo escuchar en bucle una y otra vez y que transmite energía a raudales. Y el verso del estribillo (y que da título al tema) se lo regaló Billy Preston. Ahí es nada.
Un disco:
The Dark Side Of The Moon (Pink Floyd, 1973).
The Dark Side Of The Moon me parece algo inigualable. Para mí supone la magnífica complejidad de Pink Floyd sumada a la experiencia con varios discos a la espalda, que pone las mejores canciones y al mejor equipo humano al mando de una obra de difícil comparación. Las canciones y sus temáticas, los detalles sonoros, la continuidad entre los cortes, el sonido, la mezcla…. No estoy descubriendo nada nuevo, pero para mí ese disco está en lo más alto.
Un concierto:
Neil Young. Rock in Río, Madrid. 2008.
Fue un regalo sorpresa, que no descubrí hasta estar muy cerca del recinto. Recuerdo la incertidumbre en el viaje de Valencia a Madrid (sin saberlo), en plena ola de calor, en un coche sin aire acondicionado. Neil Young tocaba en Rock in Río y para mí fue una noche inolvidable. Ver desde las primeras filas a Larry Cragg, su asistente de guitarras durante una gran parte de su carrera, fue increíble. Un concierto redondo, con una parte intermedia acústica donde además interpretó algunos temas de Harvest y la mítica Mother Earth solo al harmonium. Que el primer tema fuera Mr. Soul ya me dejó en shock. Impresionante.