Manel.

Nueva edición del Deleste, nueva etapa. Estrenan ubicación al aire libre (Jardines del Palau de la Música) y ganan en aforo. Además, recuperan el Deleste Electrònic (Terraza del Palau de la Música, entrada gratuita). En el cartel, 8 propuestas musicales. De ellas te hablamos siguiendo el orden en el que se subirán al escenario. La cita es el próximo sábado, 9 de noviembre. Nada mejor que reflexionar con música.

Ferran Palau (12h)

El cantante y guitarrista de Anímic tendrá la (siempre difícil) misión de abrir la jornada con su proyecto personal, Ferran Palau, con el que ya atesora cuatro discos. Del más reciente, Kevin (Hidden Track, 2019), nos hablo en primera persona, y canción a canción, en este artículo que publicamos hace unas semanas. En el mismo apuntábamos que la musica de Palau es un planeta en sí misma, un interruptor que hace click y te abre su puerta, un remanso frente al ruido que nos rodea. Pop vaporoso, con pellizcos de soul elegante, y alguna otra excursión sonora más.

The New Raemon & Paula Bonet (13.15h)

Los caminos de The New Raemon y Paula Bonet se cruzaron en 2017, con la publicación de un libro y un disco que compartían título, Quema la Memoria. En el libro, Bonet ilustraba todas las letras (84 canciones) que él había escrito hasta entonces. En el disco, el músico hacía balance de sus primeros diez años como The New Raemon, con portada de ella. Ahora coincidirán en el escenario del Deleste. The New Raemon tocando y cantando y Paula Bonet dibujando en directo.

Nøgen (14.20h)

Nøgen significa «desnudo» en danés y es que en Dinamarca fue donde nació el proyecto. Allí estaba Markel Idigoras de Erasmus y a su vuelta a Donosti lo hizo acompañado de unas cuantas canciones. El año pasado publicaron su primer disco grande, Liv til Døden, nueve temas que transitan por un folk-pop con aires épicos que mira en el horizonte a Mumford and sons, Of Monsters And Men y La M.O.D.A., como influencias declaradas.

Alavedra (17h)

Alavedra es una ecuación en la que parece no faltar de nada: rock trotón, pop acelerado, punk guarrete, tropicalismo disfrutón, garage saltimbanqui, surf de guardería, mucho sentido del humor, letras galácticas, desenfado y gamberrismo. El nombre lo toman prestado de un político catalán que fue condenado por blanqueo de dinero y cobro de comisiones ilegales, el de su nuevo ep (tu rostro mañana) se lo han birlado al escritor Javier Marías y entre sus miembros hay gente de Bearoid, Falciots Ninja o Pantocrator.

Mueveloreina (18.15h)

Y la música urbana llegó al Deleste. Mueveloreina serán los encargados de abrir esa puerta. El dúo (Karma Cereza y Joaco J. Fox) mezcla, sin prejuicios, electrónica, trap, cumbia, reggaetón, hip hop y todo aquello que les sirva para incitar al baile al público. En sus letras aprovechan para apuntar hacia desigualdades y problemas sociales actuales.

Pony Bravo (19.45h)

A Pony Bravo le ha podido pasar con el humor aquello de que los árboles no dejan ver el bosque. Y que el jiji-jaja de algunas letras, de algunos carteles, … haya desviado la mirada de lo que de verdad importaba, su música. Esa narcotizada y sureña manera de conjugar la psicodelia andaluza con la americana. Después de seis años sin disco nuevo han publicado el mejor de su carrera, Gurú, que sigue explorando en todas las direcciones (flamenco, pop, afrofunk, versionaza de Las Grecas,…) sin peligro de llenar el vaso. Al aire libre y de noche ya, su concierto debe de ser uno de los momentos del Deleste 2019.

Second & Orquesta de València (21.15h)

Second forma parte de ese indie mainstream que copa cabeceras en festivales y que ha hecho de la epicidad exagerada y las letras rococós su bandera. En su concierto en el Deleste, los murcianos estarán acompañados de la Orquesta de València, dirigida por el maestro Daniel Abad, que se ha encargado de «realizar arreglos sinfónicos a algunas de las canciones del último trabajo de Second, Anillos y Raíces, para adaptarlos a la puesta en escena de un concierto que contará con más de cincuenta músicos sobre el escenario».

Manel (23h)

Manel se han abonado al +1 con cada entrega discográfica. Lejos de sentarse en las sillas que aparecían en la portada de su primer disco a ver la vida pasar componiendo tonadas folk, siempre han ido progresando adecuadamente. Puede que ahora con su reciente Per la bona gent (Ceràmiques Guzman, 2019) sea más palpable esa amplitud de miras, aunque ya estuvo allí en entregas anteriores. Sí que es cierto que los samplers han tomado más protagonismo y que todo el álbum aparece envuelto de una huracanada euforia, pero sin que eso signifique que haya que hablar de unos nuevos Manel.