Aparecieron como un soplo de aire fresco en una escena independiente excesivamente endogámica y rindiendo homenaje, en clave de rock sureño, a los futbolistas Montero Castillo y Aguirre Suárez. Tuvieron que convivir con la incómoda etiqueta de «grupo paralelo de». Desde el primer instante dejaron bien claro que hacían lo que querían y cuando querían (o podían). Dos discos grandes y tres pequeños han situado al Grupo de Expertos Solynieve en una posición privilegiada.
Este año habéis publicado el ep «Colinas Bermejas», con el que se inicia una nueva etapa en el grupo, aunque solo sea por el cambio de sello discográfico. ¿Por qué el fichaje por El Segell del Primavera?
Queríamos dedicar todo el tiempo y la energía disponibles para el Grupo de expertos Solynieve a componer, tocar y grabar, sin preocuparnos de otros aspectos. Nos apetecía un cambio en el modo de gestionar la actividad del grupo y tuvimos la enorme suerte de recibir varias ofertas para dirigir la contratación y la vertiente discográfica del grupo de las cuales la del Segell nos pareció la más conveniente.
Son, también, posiblemente las 4 canciones menos inmediatas de vuestro repertorio. Temas de esos que se van descubriendo y disfrutando en sucesivas escuchas. ¿Casualidad o va por ahí el futuro del grupo?
Las canciones responden a un momento creativo determinado, no hay una intencionalidad, una búsqueda de mayor o menor inmediatez, y no sé si determinarán nuestra producción futura. Lo único cierto es que estamos muy satisfechos con el disco.
Además, da la sensación que ese poso de rock clásico norteamericano que solía estar presente en todos vuestros discos, aquí diluye su protagonismo en pos de otras sonoridades.
Es posible que las influencias hayan terminado por diluirse en nuestro propio sonido y aunque aún sean parte importante de él no puedan distinguirse de otros rasgos que lo caracterizan. No hemos ocultado nada premeditadamente, solo nos dejamos llevar e interpretamos las canciones del modo que las entendemos.
Una de las constantes del grupo es no seguir ningún patrón establecido a la hora de acercaros a un determinado tipo de sonido. La canción «Sahariana» sería el mejor ejemplo. ¿Esa amplitud de miras también la tenéis como oyentes de música?
Sí. Nos gusta la música y la escuchamos y tocamos sin demasiados prejuicios. Influidos en cada momento por aquello que más nos interesa y emociona.
¿Cómo conseguís esa riqueza y variedad sonora sin perder la coherencia como grupo?
Supongo que es algo que sucede de manera natural. Compartimos lo que nos une y no prestamos mucha atención a lo que nos separa. Eso nos mantiene unidos y va definiendo la identidad de nuestra producción.
Vuestros ep’s, hasta ahora marcaban la espera entre un disco y otro, ¿seguirá siendo así? ¿Habrá que esperar otros 6 años para un nuevo álbum?
Cada disco responde a un momento creativo del grupo. El formato es lo de menos. No vendemos discos por peso, solo conjuntos de canciones que responden a unas motivaciones, a una coyuntura. Si de una de nuestras reuniones obtenemos canciones para un lp, hacemos uno; si hay para un ep, es un ep lo que publicamos. Solo intentamos que el conjunto sea coherente. No sabemos qué será lo próximo pero todo apunta a que será un nuevo ep.
Aunque hubo gente que no supo leer las letras de vuestro primer disco, el compromiso político siempre ha estado presente, pero además mezclado con un tono hedonista que convierte en más eficaz el mensaje.
El hedonismo está en nuestro origen. Hacemos canciones y las hacemos de una forma determinada porque nos divierte, nos hace felices. Es una parte fundamental de nuestra propuesta, como el compromiso político, y se manifiestan formas distintas en nuestras canciones. Pensamos que cada uno de esos rasgos hace más sólido el discurso. El equilibrio entre ellos se da de manera natural. Supongo que, simplemente, no podemos hacer las cosas de otra manera.
También hay cierta querencia por el humor en las letras. ¿Qué importancia tiene el mismo?
Siempre hemos considerado el sentido del humor como una herramienta eficaz y un rasgo de inteligencia y distinción.
Tenéis una habilidad innata para hacer vuestras las canciones que versioneáis, ¿qué criterio seguís para seleccionarlas?
Hacemos versiones de canciones que consideramos imprescindibles, que nos parecen hermosas, que nos emocionan por cualquier razón y que consideramos que la gente debería conocer.
Componente político al margen, ¿se puede decir que sois un grupo nacionalista granadino, muy militantes en la causa de reivindicar la ciudad y su vida en ella?
No somos nacionalistas en un sentido excluyente, simplemente usamos Granada como metáfora de algo universal. Concretamos en nuestra ciudad aspectos más abstractos, o universales, porque la conocemos suficientemente bien como para hablar a través de ella con propiedad de tales aspectos.
Si el grupo se hubiera formado dentro de 30 años, ¿qué futbolistas actuales hubieran inspirado vuestro primer disco?
Nos lo preguntas dentro de treinta años, ¿vale?