Íñigo Soler. Foto: Janire Martínez.

Sobre Tierra – Fútbol y Raíces ya te hablamos cuando antes del verano se presentó en Filipinas 5. Entonces, ya te contamos que se trataba de «un mediometraje documental de 50 minutos, con idea original de Marta Sans y codirigido con Miguel Garde. Un proyecto personal que habla de las tardes jugando a fútbol en un pequeño pueblo de menos de 200 habitantes: Uclés, en Cuenca». La propia Sans (no te pierdas su instagram) decía que «es una reflexión sobre las cosas que nos unen. No es un ejercicio de mala nostalgia, sino buscar los puntos de unión en tiempos convulsos».

También en aquel artículo se apuntaba que Íñigo Soler firmaba la banda sonora. La primera de las cinco canciones que la componen, Empezar a querer (I), ya se ha publicado digitalmente. El resto se podrá escuchar cuando el documental acabe su recorrido por festivales y se comparta públicamente, aunque si te apuntas a su newsletter te adelanta uno de los temas instrumentales. Nosotros ya hemos tenido el privilegio de disfrutarlas todas y podemos adelantar que son tan emocionantes como un gol en el último minuto.

Soler cuenta sobre Empezar a querer (I) que «no es un himno, no es un hit, es un abrazo para los enamoradizos. Una canción sencilla, una obra pequeñita, que trata de capturar un deseo a una estrella fugaz».

¿Cómo surgió la posibilidad de hacer la banda sonora del documental?

Marta me propuso meter un tema y me gustó tanto la idea del documental que le propuse hacer una canción. Luego vi que igual necesitaban banda sonora y me ofrecí. Todo muy natural.

¿Qué diferencias ha habido a la hora de componer estas canciones respecto a cuando compones tus «otros» temas?

La diferencia es que el chispazo sale del documental y que luego al arreglar la canción la encajas en el tiempo y sonido que encaja en la estética. Pero lo que es la canción, vuelve a salir de uno mismo. El documental me transmite algo, me revive algunas historias, y hago un tema sobre ellas. Por eso no hablan explícitamente de nada del documental directamente. Así queda menos obvio o redundante.

 

El 16 de septiembre se celebró en el Jardín del Turia la Copa Lenders. Fue Marta Sans quien lo organizó, «los peores equipos de la ciudad nos damos cita este sábado» escribía en su instagram futbolero. Se enfrentaron dos equipos formados por amigas suyas, conocidas o amigas de amigas. Patricia Moreno lo cuenta mucho mejor en este artículo de Vogue. Antes del gran partido, dos escuadras masculinas hicieron de teloneros. Íñigo no pudo jugar … «por culpa del futbol. Participó de hecho mi compañero de banda, Rafa, que era capitán de uno de los equipos. Yo falté porque coincidía con unas entradas que me había comprado mi pareja para ir a Mestalla. Ella nunca había ido, es de fuera, y justo coincidió ese día. Fue igualmente un día especial y futbolero. Ese día el Valencia ganó 3-0 al Atlético de Madrid y el ambiente era de un optimismo e ilusión embriagadora». Perfecto pitido final, sin duda, para este artículo.

 

Íñigo Soler actúa este domingo, 17 de diciembre, a partir de las 12h, en el Jardí de les Hespèrides, compartiendo cartel con La Bien Querida, dentro del ciclo Serialparc.