Carlos Ciurana.

Soy Carlos Ciurana (València, 1962). Mis padres no son muy melómanos, pero a mí desde que era un crío me ha gustado la música, hasta el punto de convertirme en DJ. Escuchaba las sesiones de los DJ y en casa practicaba con dos platos y una mesa de mezclas todo lo que había sonado en esas sesiones en Espiral, Chocolate o Spook. En 1989 empecé como residente en el pub Sturmtruppen y a partir de 2003 comencé a pinchar en El Tornillo, Le Club Du Pop, Flow, Excuse Me, Deejing, MurrayClub o Velvet, y en 2005 pinché en la Fiesta de la Playa del FIB. Como redactor musical, comencé con unos amigos del FIB en la web Caja de Ritmos, luego entré en Mondosonoro Comunidad Valenciana con Raúl Serrador, Vinilo Valencia / Redacción Atómica con Quique Medina, y finalmente con Xavi Hernández en Club de Pilotos Suicidas, quien delegó en mi como editor ya que sus obligaciones laborales y familiares no le permitían compaginarlo.

¿Cuál es el primer recuerdo musical que tienes?

Como he dicho antes, mis padres no son muy aficionados a la música, mi madre más que mi padre. Había en casa una radio de aquellas enormes, una Telefunken, con una tapa en la parte superior donde se alojaba un tocadiscos. Tenían algunos discos de Ennio Sangiusto, Les Surfs, Kuldip, Raphael, Adamo… y eso es lo que recuerdo que escuchábamos. Luego ya nos compraron a mí y mis hermanos un portátil Cosmos donde empezaban a sonar The Rubettes, Gloria Gaynor, Paco de Lucía, Gary Glitter y Bob Dylan, incluso “La Ramona” de Esteso o Boney M.

¿Cuál fue el primer disco que te compraste?

Los discos que he mencionado antes eran regalos de cumpleaños, por Navidad o en ocasiones especiales, así que el primer disco que compré con mi propio dinero, que era lo que ahorraba de la paga semanal que me daban mis padres fue el single Hurricane, de Bob Dylan. Vivíamos en Sagunto por aquella época y en la calle mayor había una tienda de electrodomésticos que ponía discos en el escaparate. Allí estaba el single de Dylan con “Huracán” Carter mirándome y a su lado el Only You, de Ringo Starr. Como ya había escuchado las canciones por la radio, la elección estaba clara.

¿Qué importancia tiene y ha tenido la música en tu vida y en tu día a día?

La música es algo muy importante para mí, es una válvula de escape que me hace desconectar de la rutina diaria y olvidarme por unos instantes de todo. Además puedes recordar momentos vividos al escuchar una canción concreta, lugares y situaciones. También me ha permitido conocer a músicos a los que admiro, como Rudi Protrudi de The Fuzztones, cuando le entrevisté, o conversar con Erlend Oye en el FIB, que se interesó por los discos que llevaba en mi maleta. En el día a día descubres grupos que llegan al correo de la redacción, no sabes la cantidad de emails que pueden llegar con nuevas bandas todos los días, una locura. Después ya empiezas a seleccionar aquello que te puede gustar más y prestarle atención, además de leer revistas, libros y webs especializadas.

¿Qué estás escuchando ahora?

En cuanto a grupos locales, escucho bastante a La Culpa, con una canción que me tiene enganchado, “Mirar de lejos” de su nuevo álbum Cuando amanece. Hay muchas bandas locales de nueva hornada que han escogido el post-punk para darse a conocer, como Semana Santa de los que me gusta mucho “Cada vez más lejos” de su álbum debut. Otros valencianos que pongo a menudo son Gamada, en una onda más oscura con guitarras y sintetizadores, destacando el tema “Nuevo Orden”. Luego en el apartado nacional, Yawners también me gusta, Elena tiene buenas canciones como “Honey” de su último disco publicado Duplo. También Depresión Sonora, con El Arte de morir muy despacio ha conseguido un muy buen primer álbum que despierta muchas emociones, me gusta especialmente “Bienvenido al Caos”. De bandas extranjeras y clásicos siempre hay momento para el Stupidity de Dr. Feelgood y “Going Back Home” con la guitarra killer de Wilko Johnson y la armónica de Lee Brilleaux, nunca me canso de escuchar este disco, que captura la esencia de la banda en directo. Un tema nuevo que me ha sorprendido es “Share My Heat” del nuevo EP de los galeses The Joy Formidable, 15 minutos de subidas, bajadas, paradas, con la voz susurrante de Ritzy, una guitarra infecciosa, un ritmo kraut, percusiones y pinceladas electrónicas. El nuevo single de The Yard Act, “The Trench Coat Museum” es una bestialidad, como si The Fall hubieran sido abducidos por LCD Soundsystem, un must en las pistas de baile. Los norteamericanos The Vacant Lots acaban de publicar su quinto álbum, Interiors, en el que se dejan oír influencias de The Jesus & Mary Chain con canciones como “Evacuation”. Para finalizar, uno de los primeros grupos que hicieron interesarme por la música electrónica, Kraftwerk y su “Radioactivity”, en cuanto escuché esta canción compré el single y más tarde el LP cuando se publicó, en aquellos años fue todo un descubrimiento.

1- Mirar de lejos (La Culpa)

2- Cada vez más lejos (Semana Santa)

3- Nuevo Orden (Gamada)

4- Honey (Yawners)

5- Bienvenido al Caos (Depresión Sonora)

6- Going Back Home (Dr. Feelgood)

7- Share My Heat (The Joy Formidable)

8- The Trench Coat Museum (The Yard Act)

9- Evacuation (The Vacant Lots)

10- Radioactivity (Kraftwerk)