A Junior SuperSnob le pedimos hace ya un tiempo que nos seleccionara doce canciones de amor en Verlanga (lo podéis leer aquí). Para los que no le conozcáis, tiene un programa de radio, pinchaba cuando se podía pinchar y es un gusto conversar con él. Ahora anda con un nuevo proyecto muy interesante que gira en torno al placer de bailar. Cada domingo publica un nuevo capítulo de Ritmo y Poética de la Música para Bailar, un ensayo en el que cuenta con las colaboraciones de Amable, Miqui Puig, Finalversion3, José Mardi y Edu Olmedo. Ya se pueden leer tres episodios. En el primero (que en realidad es el cero), el autor nos hace un resumen de sus antecedentes p̶e̶n̶a̶l̶e̶s̶ musicales por los que desfilan coplas al lado de su madre, un transistor heredado, el Mamy Blue de los Pop Tops, la máquina de discos del futbolín del Tío Paco o el disco Desiree de Dylan. En los dos siguientes ya se pisa la pista. Pero igual que cuando se baila es mejor dejarse sorprender por el dj, en esta lectura ocurre lo mismo y no añadiremos nada más, solo esa verdad que dice Miqui Puig: «bailar es el momento en que tú eres tú. Aunque se baile sin gracia, es la puta libertad«.