«Las mañas o la llegada del pan». Foto: Patricia Vargas.

En Las Mañas o la llegada del pan (Sala Ultramar, del 8 al 18 de abril), tres mujeres que nunca han salido de su pueblo discuten en bucle porque como bien dice su autor, Paco Zarzoso, “callar es morir”. La España vaciada, las discusiones familiares, el mundo exterior, todo esto y más se recoge en este texto de Zarzoso que pone el foco sobre el momento presente y todo lo que nos rodea. Una comedia con ecos de Chéjov y Valle-Inclán con aroma a pueblo, a tardes a la fresca y a pan. Las Mañas o la llegada de pan, cuenta con dirección de Marcos Sproston e interpretación de este mismo, de Rocío Ladrón de Guevara, Pilar Rochina y José Blasco.

Sacamos las sillas a la fresca y le pedimos a Marcos Sproston que nos cuente lo que es Las mañas para él y a Paco Zarzoso lo que no es.

«Las mañas o la llegada del pan». Foto: Patricia Vargas.

Las mañas es:

✍️ Marcos Sproston

➡️ El espectáculo final. La versión acabada, más que “la versión larga”. Una producción nueva con la esencia de lo que teníamos pero con una nueva idea de dirección, escenografía, vestuario y caracterización. Por no hablar del texto que tiene mucho más vuelo, trama, humor y la aparición de un nuevo personaje.

➡️ Una obra que se piensa para ser accesible, divertida, cercana pero sin renunciar en ningún momento a la poesía, la denuncia político-social o la reflexión sobre los grandes temas (la vida, la muerte, la soledad, el abandono). Una obra que puede interesar a distintos tipos de público por razones diferentes. Le puede gustar a mi abuela o a un profesor de universidad.

➡️ Las únicas habitantes de un pueblo vaciado entre los picos de Urbión, los valles de Babia, los Cerros de Úbeda y el quinto Pino.

➡️ Mujeres fuertes, autosuficientes, con una inmensa dignidad.

➡️ Abuelas solteras con carácter y tenacidad. Con instinto de supervivencia y sentido del humor.

➡️ Símbolos de la España rural, la España profunda.

➡️ Tres hermanas abandonadas a su suerte.

➡️ Personas mangoneadas por el poder porque el voto de cada una de ellas vale por mil.

➡️ Condesas calzadas con las alpargatas de la despoblación.

➡️ Un homenaje a nuestras madres y abuelas.

➡️ Hijas de Rigoberta “la maña” cuyo apodo fue otorgado por las mañas que tenía en el capado de los cerdos.

➡️ Hijas de Valle-Inclán, Goya y Amanece que no es poco.

➡️ Son capaces de decir las frases más bellas sin conocer su significado.

➡️ La representación clásica de las dos Españas pero añadiéndole una tercera, la del centro, la que no se moja, la que se hace la imparcial, la que sufre los garrotazos por ambas partes.

➡️ Como buenas hermanas tienen una relación muy profunda de amor-odio e interdependencia.

➡️ Un ejemplo de que lo último que tenemos que entregar es la esperanza.

«Las mañas o la llegada del pan». Foto: Patricia Vargas.

Las mañas no es:

✍️ Paco Zarzoso

➡️  No son directivas de Amazon.

➡️  No confunden un campo de golf con un bosque centenario de tejos.

➡️  No son socias del Club Gourmet del Corte Inglés.

➡️  No tienen tarjetas de crédito ni Cristo que las fundó.

➡️  No hacen ascos a castrar a sus cerdos de igual manera que lo hicieron abuelos y padres… Por desgracia no podrán enseñar este arte a sus hijos.

➡️  No tienen ningún nicho reservado en el muro de Facebook.

➡️  No saben idiomas, pero reconocen el canto de una treintena de pájaros de la república ibérica.

➡️  No saben quién es Goya, a pesar de haber sido creadas por él, en el séptimo día, antes de descansar en Burdeos.

➡️  No son florecillas de afables perfumes, pero tampoco plantas carnívoras.

➡️  No son depredadoras de series de tv, pero sí adoratrices de Rafaela Carrá.

➡️  No son muy buenas, ni demasiado nobles, pero por ser las últimas de filipinas de la España vacía, son sagradas.

➡️  No han sido las arquitectas de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de València, pero sí han sido capaces de restaurar el tejado de las parideras donde nacen sus corderos.

➡️  No son inmortales, pero tampoco demasiado mortales.

➡️  No son vedettes del Plata “el último cabaré vivo del Tubo”, pero a una de ellas, le hubiera gustado serlo.

➡️  No hablan con metáforas, pero respiran con metonimias y cantan con prosopopeyas.

➡️  No son picadoras, ni banderilleras a pesar de que soñaron, al escuchar juntas una canción en una radio, con un Cupido pilotando un Sinca Mil.